Mientras medio mundo pasa las Navidades aguantando estoicamente el frío que tan habitual es por estas fechas en ciertas partes del planeta, otros han decidido poner tierra de por medio y trasladarse a un lugar donde reinen el sol y el calor. Tal es el caso del futbolista Raúl González y su esposa, la modelo Mamen Sanz, que han aprovechado unos días libres para viajar a Florida con sus cuatro hijos y el padre del capitán del Real Madrid. Saboreando el éxito que disfruta como líder del equipo blanco tras la victoria frente al Barcelona y situándose en lo más alto de la Primera División, el jugador pasa sin duda unas felices fiestas.
Regalándonos una tierna estampa familiar, la pareja ha pasado las navidades en las playas de Miami con los pequeños Jorge y Hugo, de siete y cinco años, y los mellizos Héctor y Mateo, de dos. Los niños se lo pasaron en grande bañándose en el mar con sus famosos papás y jugando a las palas con el deportista, que a juzgar por las imágenes podemos asegurar que está hecho un auténtico padrazo. Los pequeños contaron además con la compañía de su abuelo, que se unió a ellos en lo sus divertidos juegos sobre la arena.
Durante algunos ratos en que el padre de Raúl ejerció de improvisada niñera con sus nietos, el deportista y su mujer aprovecharon para tomar el sol y dar paseos de la mano por la orilla del mar, volviendo a lucir sus estupendas figuras en bañador. El matrimonio sigue tan enamorado como el primer día. Se conocieron en enero de 1998 y en julio del año siguiente dieron el paso y se casaron por la iglesia en una ermita de la madrileña urbanización de Villafranca del Castillo. Dos meses más tarde anunciaron que esperaban su primer hijo, Jorge, al que dos años después dieron un hermanito, Hugo. Hoy, con los mellizos Héctor y Mateo nacidos en noviembre de 2005, forman ya una feliz familia numerosa.
