El miedo al contagio durante la crisis sanitaria del coronavirus y la recomendación de quedarnos en casa ha alterado la rutina de paseo con tu perro. Estamos ante una situación inusual que repercute en los hábitos de todos los integrantes de la casa. Las mascotas necesitan salir, al menos dos veces al día, pues de lo contrario pueden verse afectados su salud y su estado de ánimo.
De hecho, puede que en estos días hayas notado un cambio en su temperamento. Aunque lo saques, tu perro nota los cambios familiares y sabe que algo diferente ocurre. Esta situación puede producirle ansiedad si, además, sus costumbres más básicas se ven afectadas. Cuando lo llevas de paseo tu perro hace ejercicio, fundamental para mantener su salud, socializa, entrena su olfato y crea un vínculo especial contigo. Algo que está cambiando al restringirse sus salidas, que ahora son más cortas.
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El ejercicio físico
El paseo de los perros es más que un ejercicio físico que sirve para mantener su estado de salud y su equilibrio emocional. Cuando un perro no da paseos con su dueño, aunque sean breves como los que estáis realizando ahora, suele tener conductas que denotan su intranquilidad. Pueden volverse irritables y algo más agresivos porque su nivel de ansiedad ha aumentado y no encuentran otra manera de canalizarlo. Según el carácter del perro, puede demostrar ese malestar rompiendo objetos, mordiendo calzado y muebles y, en casos extremos, toman el control de la casa. Algunos perros reflejan su malestar desafiando el papel dominante de sus dueños y ladrando de una manera desesperada.
En perros que suelen ser de carácter apocado, la falta de paseos puede causarle problemas en su pelaje, tristeza y apatía. Una buena manera de revertir esta situación, producto del miedo y la ansiedad, es jugar más tiempo con él. El objetivo es prestarle una atención especial y cuidar de que no quede relegado a un segundo plano pese a la situación.
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Problemas de conducta y relación
Que tu perro sea cariñoso y sociable se debe, en gran medida, a que se ha relacionado desde cachorro con otras personas y animales. La manera de lograr esa sociabilización es mediante los paseos. Notarás pronto si una mascota tiene esta habilidad desarrollada por su comportamiento, especialmente, en sociedad.
El juego es un complemento de los paseos aunque, si reduces la cantidad de salidas diarias de tu mascota, puedes aumentar el tiempo de juego en casa. Es una manera simple de compensarlo y de reafirmar el cariño que sientes hacia él.
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Cambio de temperamento y conductas
Como hemos visto, el ejercicio físico que realizan los perros con los paseos diarios ayuda a que se mantengan saludables, alegres y vivaces. Si no puedes sacarlo durante la cuarentena porque estás enferma o tienes que cuidar de un familiar que sí lo está, procura que el perro no se quede sin sus salidas.
Si no cuentas con nadie en casa o vecino que pueda ayudarte, muchas protectoras y refugios están brindando ayudas a las personas que tienen una mascota y no pueden hacerse cargo de ellas durante la cuarentena.
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Estimulación del olfato
El olfato es un sentido fundamental del animal, cada vez que sale lo entrena y esto hace que estimule su curiosidad. Es una manera de entretenerse mientras se cansa y relaja. Si vives en una casa con patio, no reemplaces esto por dar paseos a su lado. Solo cuando está en un sitio que le resulta ajeno mostrará conductas a revertir. Todo lo que hagas con tu mascota es una manera de crear un lazo único de afecto. Cada paseo es una posibilidad de afianzar ese vínculo porque se generan momentos de confianza y unión.
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