Psicología

Soñar es más importante y necesario de lo que crees

Además de lo reparador de un buen descanso, soñar sería una manera de canalizar las preocupaciones del día.

Por hola.com

¿Te ha pasado alguna vez de despertarte por la mañana y tener la respuesta a un problema que llevaba tiempo en tu cabeza? No eres a la única a la que esto le ha ocurrido.  La primera vez que se planteó, que nuestra mente trabajaba mientras dormíamos, fue en la década del 70. 

El académico William Dement, profesor de la Universidad de Stanford, realizó un estudio con 500 voluntarios en el que buscaba comprobar si el cerebro se mantenía en alerta durante el sueño. A la mitad de las personas que intervinieron se les entregó una serie de acertijos, cuya solución parecía compleja a simple a vista, pero no lo era. Este grupo debía entregar las respuestas a lo largo de la mañana del día siguiente. A la otra mitad de participantes, los mismos acertijos, se entregaron durante la mañana y el plazo para resolverlos era hasta la tarde de ese mismo día. 

Los mejores resultados los obtuvo el grupo que, sin más opción, debió dormir antes de hacer las respuestas. Varios de los participantes aseguraron que, durante la noche, soñaron con estas. No lo hicieron de una manera obvia y gráfica, sino dentro de un contexto diferente al de su realidad. 

Sin embargo, el descubrimiento más significativo lo hizo el profesor Denise Cai, de la Universidad de California en San Diego, al revelar que la creatividad y la reflexión se inducen a través de lo que soñamos, no en el simple hecho de dormir.

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¿Qué pasa si no sueño?

Por regla general todos soñamos, aunque no lo recordemos al despertar. Los sueños aparecen en distintas fases, hay momentos del descanso en el que podríamos no estar soñando, porque lo hace en fases de 90 minutos. El mismo estudio del profesor Cai demostró que la creatividad para desenvolverse en el día a día era mayor en aquellas personas que podían soñar durante más tiempo.

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Se cree que soñamos, incluso, desde ante de nacer. Algunos estudios afirman que durante la última parte de la gestación, el feto tiene un ritmo de sueño y vigilia muy similar al que tendrá cuando nazca. Aunque, todavía  es imposible, conocer lo que sueña un feto o un bebé. 

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¿Por qué soñamos?

Biológicamente soñamos para equilibrar y reparar el sistema nervioso.Sin embargo, los sueños no solo se producen por una necesidad física sino que incluyen componentes sociales vivenciales y personales. 

Según las creencias personales, un único sueño puede tener la misma interpretación o no. En el psicoanálisis, ciertas imágenes o figuras de los sueños representan a otras, por ejemplo el agua, la madre, o la serpiente. Si por el contrario no abogamos por la teoría psicoanalítica, los sueños aislados no tienen mayor significado, pero se vuelven objeto de estudio cuando el mismo sueño perdura a lo largo del tiempo. Es entonces cuando los sueños podrían estar poniendo de manifiesto preocupaciones, traumas o conflictos actuales o del pasado. 

Soñar es otra forma de conocernos íntimamente. A través de estos ponemos de manifiesto miedos, ilusiones y preocupaciones. Los sueños son una forma de expresar otro aspecto de la personalidad. Es una manera de exponerla, por varios motivos, no hacemos de manera pública y abierta. 

La lógica, como la razón, no siempre intervienen en los sueños, sin embargo, las imágenes y los temas que abordamos en ese momento suelen ser reales, producto de lo que nos rodea o conocemos. Al unirse, el resultado puede ser tan surrealista y maravilloso que analizarlo parezca absurdo. En esos sueños podrías estar revelando aspectos de tu vida cotidiana que ya no te satisfacen o que requieren una intervención. Si tienes algún problema que te aqueja y no obtienes la respuesta de manera consciente, la forma en la que el inconsciente pueda revelarse te sorprenderá.

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