El tomate suele ser uno de los imprescindibles de casi cualquier pizza. En este caso apostaremos por la variedad cherry, e incluiremos también berenjena y albahaca. ¡Magnífica combinación de sabores!
- 1 lámina de Masa para pizza
- 1 Berenjena grande
- 125 g de Tomates cherry alargados rojos
- 125 g de Tomates cherry alargados naranjas
- 1 manojito de Albahaca
- 75 g de Queso de Mahón rallado
- 3 cs de Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
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1.
Precalentar el horno a 210º.
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2.
Lavar los tomates y cortarlos en cuartos.
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3.
Retirar las puntas a la berenjena y cortarla en rodajas finas con ayuda de una mandolina.
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4.
Forrar una bandeja de horno con papel sulfurizado.
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5.
Extender la lámina de masa y colocarla en la bandeja.
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6.
Repartir por encima el queso rallado y cubrir con las rodajas de berenjena y los cuartos de tomate.
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7.
Espolvorear con sal y pimienta recién molida, rociar con el aceite y meter al horno a 210º entre 15 y 18 min, hasta que se doren los bordes.
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8.
Sacar la pizza del horno y colocar por encima las hojas de albahaca.
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