El aguacate y la patata son los protagonistas de esta crema, que vamos a acompañar con unos daditos de ambos ingredientes, además de con unos crujientes chips de calabaza. Una receta súper fácil de preparar, que está llena de vitaminas y de colorido y que te encantará.
- 2 ud de Aguacate
- 2 ud de Patata
- 1 unidad de Cebolla
- 800 ml de Caldo de verduras
- 1 trozo de Calabaza
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva virgen extra
- Perejil fresco
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1.
Precalienta el horno a 180 grados.
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2.
Con el pelador corta casi toda la calabaza en láminas finas y colócalas en una bandeja de horno con un poco de papel vegetal.
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3.
Echa un poco de aceite de oliva y hornea durante 10-15 minutos y cuando estén, salpiméntalos y reserva.
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4.
Corta en daditos el resto de la calabaza.
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5.
Pela las patatas y la cebolla y trocea en dados.
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6.
Pela los aguacates, quita los huesos, corta unos daditos para la decoración y trocea el resto.
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7.
Rehoga en una cazuela con un pelín de aceite la patata, la cebolla y los dados de calabaza y salpimenta.
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8.
Retira la calabaza para la decoración, cubre el resto con el caldo de verduras y cuece hasta que se ablanden.
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9.
Incorpora el aguacate y tritura bien.
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10.
Sirve la crema y acompaña con los dados de aguacate y de calabaza que habías reservado.
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11.
Añade los chips de calabaza y un poco de perejil.
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