Una ensalada que mezcla los ingredientes en crudo, preparados en tan solo diez minutos, que esconde su secreto en el aliño, a base de aceite, vinagre y un poco de hierbabuena, lo que la convierte en un plato muy aromático. Es sencilla, ligera y perfecta como acompañamiento de un pollo o una carne.
- 150 g de Remolacha
- 150 g de Zanahoria
- 0.5 ud de Zumo de limón
- 1 cs de Vinagre de vino blanco
- 3 cs de Aceite de oliva
- 0.5 cs de Mostaza
- Sal
- Pimienta negra
- 1 manojo de Hierbabuena
- 0.5 ud de Manzana
INFORMACIÓN NUTRICIONAL
Calorías
205cal
Hidratos
16g
Grasas
13g
Proteinas
3g
-
1.
Pelamos la remolacha y la cortamos en láminas (o la rallamos, según nos guste). Pelamos tambien la manzana y la cortamos en dados, rociándola con el zumo de medio limón. Lavamos, pelamos y rallamos también las zanahorias. Lo pasamos todo a un cuenco y reservamos.
-
2.
Mezclamos el vinagre, el aceite, la mostaza, la sal y la pimienta en un bol pequeño, removiendo bien y añadiéndole al final, la hierbabuena.
-
3.
Rociamos la ensalada con el aliño y, si queremos, adornamos con unas hojas más de hierbabuena.
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