Si no tienes heladera en casa, no desistas de hacer tu propio helado. Con un congelador basta y aunque es un poco más laborioso, el resultado es también riquísimo. Te proponemos una versión casera que lleva las famosas galletas oreo, que gustan a grandes y a pequeños. Es súper fácil de preparar y solo tendrás que tener paciencia porque necesita tiempo de congelación.
- 120 g de Galletas Oreo
- 2 ud de Yemas de huevo
- 90 g de Leche condensada
- 200 ml de Nata para montar
- 50 ml de Leche
- 1 cc de Extracto de vainilla
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1.
Empezamos montando la nata. Nos será de ayuda hacerlo en un bol previamente metido en la nevera para que esté frío., igualmente cuanto más fría esté la nata mejor montará.
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2.
Picamos las galletas con una trituradora dejando algunas para la decoración final.
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3.
En el vaso de la batidora echamos las yemas de huevo, la leche condensada, la leche entera, la vainilla y la mitad de las galletas Oreo picadas.
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4.
Trituramos bien hasta obtener un compuesto homogéneo.
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5.
Volcamos sobre un recipiente grande y añadimos la nata que integraremos, ayudándonos con una varilla, con movimientos envolventes para que nos quede una mezcla cremosa.
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6.
Echamos en un táper o en un recipiente apto para meter al congelador.
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7.
Una vez dentro del congelador, tendremos que ir batiendo la mezcla cada 2 horas para que no se formen cristales de hielo.
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8.
Dejamos en el congelador por espacio de 6 horas.
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1.
Servimos con las galletas reservadas.
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