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¡HOLA! COCINA
Esta tarta encantará a los más pequeños de la casa. Juega con distintos colorantes alimentarios y con las grageas o caramelitos para decorar. Lo bueno que tiene esta receta es que está hecha con un preparado para bizcochos, con lo que te ahorrarás mucho tiempo en su elaboración. Eso sí, necesitas tener 4 ó 5 moldes redondos iguales para hacer las distintas capas de la tarta. Si no los tienes, te valdrán los de usar y tirar.
Para la base
- 2 paquete de Preparado para bizcocho casero (375 g cada uno)
- Colorante alimentario líquido (rojo, azul, amarillo y verde)
- Caramelos de colores para decorar (tipo M&M’s, perlas, fideos o lacasitos)
Para el glaseado
- 200 g de Mantequilla en pomada
- 500 g de Azúcar glas
- 4 cs de Leche
PARA LA BASE
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1.
Precalentamos el horno a 180ºC.
-
2.
Seguimos las instrucciones del fabricante para preparar el bizcocho y dividimos la mezcla en 5 cuencos pequeños.
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3.
Coloreamos cuatro de ellos, cada uno con un color distinto (azul, verde, rojo y amarillo), y el quinto con una mezcla de rojo y amarillo para obtener un tono naranja.
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4.
Vertemos cada uno en un molde redondo de 18 cm de diámetro forrados con papel sulfurizado y horneamos entre 20 y 25 minutos a 180°C, hasta que al pincharlos con una aguja esta salga limpia.
-
1.
Echamos la mantequilla y el azúcar glas en un bol grande y mezclamos con varillas hasta obtener una crema densa.
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2.
Añadimos la leche y mezclamos de nuevo.
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3.
Si la crema queda demasiado densa, añadimos más leche para diluirla.
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1.
Desmoldamos los bizcochos.
-
2.
Colocamos el bizcocho azul en una fuente redonda y lo cubrimos con una capa fina de glaseado.
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3.
Ponemos encima el verde, el amarillo, el rojo y el naranja intercalando cuidadosamente capas de glasa del mismo grosor que la primera.
-
4.
Cubrimos toda la superficie y las paredes con una capa de glasa y decoramos con los caramelos de colores.
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1.
Se puede adornar también porciones de glasa con los mismos colorantes de la tarta.
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