Hacer churros caseros es fácil aunque un poco laborioso, pero el resultado merece muchísimo la pena. En este caso, los vamos a recubrir con chocolate y los acompañamos con un batido de cacao. No es para desayunar o merendar todos los días, pero ¡date el capricho de vez en cuando! Además, estos churros son algo más ligeros porque los horneamos en lugar de freírlos.
- 250 g de Harina
- 125 g de Azúcar blanca
- 150 g de Mantequilla
- 1 unidad de Huevo
- 1 unidad de Yema de huevo
- 0.5 sobre de Levadura en polvo
- 50 g de Chocolate negro
- 600 ml de Batido de cacao
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1.
Mezcla la mantequilla con el azúcar en una cuenco grande.
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2.
Forma un volcán y echa en el cráter la levadura,la mantequila troceada y una pizca de sal
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3.
Trabaja con las manos hasta obtener una masa arenosa.
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4.
Vierte la masa sobre la mesa de trabajo, incorpora el huevo y la yema y amasa con las palmas de las manos hasta que quede uniforme y lisa.
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5.
Introduce la masa en una manga pastelera con una boquilla estriada y mete en el frigorífico durante 1 hora.
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6.
Precalienta el horno a 200ºC.
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7.
Forra una fuente de horno con una hoja de papel sulfurizado.
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8.
Con la manga pastelera con boquilla estriada, forma tiras de masa bien separadas.
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9.
Mete en el horno 200ºC entre 10 y 12 minutos, vigilando continuamente para que no se doren en exceso.
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10.
Retira los churros del horno y deja que se templen.
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11.
Derrite el chocolate al baño María o en el microondas con cuidado de que no se queme y retira.
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12.
Sumerge los extremos de los churros en el chocolate derretido y espera a que se endurezca la cobertura.
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13.
Sirve los churros acompañados de un vaso de batido de cacao.
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