Esta receta se come en frío, pero si la tomas templada, ¡también resulta riquísima! Su gran ventaja es que, al prepararse con garbanzos y pulpo ya cocidos, se hace en un santiamén, tanto que casi puedes prepararla y servirla en el momento. Nosotros no le ponemos, pero si le añades algunos encurtidos, ¡también le quedan de cine!
- 600 g de Garbanzos en conserva
- 2 ud de Patas de pulpo cocido
- 0.5 unidad de Pimiento rojo
- 1 unidad de Cebolla morada
- 1 unidad de Tomate
- Aceite de oliva virgen extra
- Zumo de lima
- Sal
- Menta
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1.
Escurre bien el líquido de conserva de los garbanzos y échalos en una ensaladera.
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2.
Pica las patas de pulpa y añádelas a la ensaladera.
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3.
Pela la cebolla morada y el tomate y pica en daditos y agrégalos también.
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4.
Lava, seca, pica el pimiento rojo en daditos y échalo en la ensaladera.
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5.
Aliña con una vinagreta echa con aceite de oliva, zumo de lima y sal.
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6.
Ya tienes listo el plato para servirlo con unas hojitas de menta y unos trocitos de lima.
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