¿Invitados en casa esta Navidad? ¡Es hora de poner a punto la cocina!

Si te toca encargarte de los menús y recibir en casa a la familia o amigos es buena idea tener en cuenta algunos ‘tips’ para llegar a las fiestas con la nevera, congelador y despensa lo más organizados posible

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A no ser que tengamos la fortuna de tener servicio doméstico o una cocina de revista y superespaciosa (o sea, si pertenecemos al 'común de los mortales') la Navidad puede convertirse en un pequeño caos cuando nos toca recibir en casa. La cocina, seguramente menos amplia de lo que nos gustaría, empieza a llenarse los días previos de alimentos o te tápers de comida preparada con antelación… Nos encantaría tener dos neveras y muchos más metros de encimera, pero no es el caso. Así que, toca actuar con previsión, ahora que estamos a tiempo, con el objetivo de que la cocina esté en perfecto estado. Conseguirlo requiere de algunas pautas muy sencillas pero imprescindibles. A continuación, os resumimos algunas de las más importantes.

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Cuanto más organizada la cocina, menos 'caos' al llegar las fiestas

Chequear la despensa y la nevera

Lo primero que debemos hacer es comprobar el estado de nuestra despensa y nuestra nevera. Seguro que hay cosas que ni recuerdas que habías comprado, y otras estarán caducadas. Saca todos los alimentos y productos, comprueba sus fechas de caducidad y tira lo que no sirve. Será una manera estupenda, además, de ahorrarte unos euros en el supermercado, evitando comprar cosas que ya tienes.

La oportunidad perfeta para limpiar

Antes de volver a guardar los alimentos, aprovecha para limpiar y desinfectar bien armarios y nevera. Hay rincones y baldas a los que no solemos llegar con la limpieza de diario, así que es un momento ideal para pasarles un paño.

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Los días previos a la Navidad, momento ideal para limpiar y ordenar la nevera

Si lo requiere, limpia también el cogelador

También es un buen momento para, si se ha acumulado mucho hielo, descongelar el congelador y limpiarlo bien. Mientras lo haces, puedes meter los alimentos congelados en bolsas isotérmicas. Por supuesto, tira también lo que ya no esté en buen estado (no debemos olvidar que los congelados también tienen fecha de caducidad). Así lo dejarás perfecto, y con sitio suficiente, para ‘la avalancha’ de alimentos que se acumulan en Navidad.

Ordena con criterio

Una vez hecho el inventario y la limpieza, toca volver a guardar los alimentos. Obivamente, puedes utilizar el criterio que te sea más cómodo, pero una forma común es agruparlos por tipo (todas las conservas juntas, todas las especias juntas, etc…). Es interesante también poner delante en las baldas los productos que vayan a caducar antes. En relación a la nevera, también es preciso tener en cuenta los consejos a la hora de disponer los alimentos (aquí os dábamos algunos tips).

La despensa, bien organizada también

Despeja, organiza y, si es necesario, tira o recicla

La Navidad es, si te toca recibir en casa, uno de los momentos del año que más tiempo pasamos en la cocina. Por eso es importante, especialmente si nuestra cocina no es grande, tener todos bien despejado y organizado. ¿Qué ya no usas esa licuadora para hacer smoothies, que lo único que hace es ocupar esapcio? Es tiempo de guardarla en un armario o, por ejemplo, regalarla a un amigo o familiar que vaya a darle más uso. Quien dice licuadora, dice todos esos elementos forman parte del ‘paisaje’ de la cocina pero a los que realmente no damos uso.

Elementos para una buena conservación, tus grandes aliados

En Navidad la comida se acumula y es importante estar bien preparado y ‘surtido’ de accesorios para una buena conservación. El papel film o el papel aluminio son las dos opciones más clásicas para conservar los alimentos y, por supuesto, no pueden faltar en tu cocina. Tampoco unos buenos tápers, ya sean de plástico o de vidrio, pero que dispongan de un buen cierre hermético. En este sentido, y ya que estamos de limpieza, aprovecha también para ordenar y, si es el caso, tirar esos tápers viejos que ya ni cierran bien. Son también muy útiles las bolsas de plástico con cierre hermético, para evitar que se salgan los elementos líquidos. No olvides tampoco los accesorios de silicona, un material resisitente y perfecto para conservar platos o alimentos que luego tienen que ir al horno o microondas.

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