Un invidente y un ex triunfito muy conocido fueron dos de las últimas incorporaciones al programa de televisión de La Voz. Los cuatro coaches completaron sus equipos hechos un manojo de nervios por conseguir el mejor fichaje de cara a los duelos. El ring de boxeo está preparado para los enfrentamientos cara a cara de los concursantes, que medirán su talento con otro de sus compañeros de grupo. Será entonces su “maestro” quien tenga la decisión final: ¿quién se marchará a casa? Ninguno quiere ser el primero en abandonar un sueño, pero el destino está en manos de la suerte y los nervios.
No fue ella sin embargo quien completó su equipo primero. Eso lo logró Bisbal, que luego se quedó de frente en el resto de audiciones. El almeriense sumó a Yanela, que cantó sentada al piano, Yolanda y el rockero Rafa. Este consiguió con su High Way to Hell que todos se dieran la vuelta y, aunque cada uno intentó convencerle con diferentes argumentos, se quedó con David Bisbal, con un estilo muy diferente al suyo. Melendi logró redondear su equipo con el único artista invidente que ha pisado el escenario de estas audiciones. Eduardo Ruimán se atrevió a todo y ganó su plaza. Su personal versión de Te quiero, te quiero de Nino Bravo fue todo un acierto, ¿no crees?
Un momento emocionante para un final de audiciones que sedujo a más de seis millones de espectadores. Y es que el espacio sigue batiendo cada semana récords de audiencia y seduciendo a los espectadores. ¿Conseguirán los duelos batir esta marca?