La actriz norteamericana Kelly Rutherford, muy conocida por sus papeles en exitosas series de televisión como Gossip Girl y Melrose Place, ha logrado la custodia temporal de sus dos hijos, que viven en Mónaco con su padre desde 2012. "Kelly está emocionada con el resultado y está deseando reunirse con sus hijos", dijo un portavoz de la Campaña por la Justicia Infantil a Hellomagazine.
Un juez de California ha firmado una orden que exige que Hermes, de 8 años, y Helena, de 6, regresen a Estados Unidos con su madre. Dicho juez dictaminó que los niños son ciudadanos y residentes de los Estados Unidos y que Mónaco, país de residencia del padre, no tiene jurisdicción sobre ellos. También dictaminó que la orden que se emitió en 2012 que le otorgaba la custodia al padre, debía ser temporal, y que fue un acto inapropiado del progenitor el establecerse en Mónaco.
La feliz noticia llega un mes después de las duras declaraciones de Rutherford a la cadena ABC News. “No sólo me ha quitado a mis hijos, sino que se los han llevado a un país extranjero. ¡No sé cómo explicar cómo me siento! Puedo estar sin verlos durante semanas. No puedo llevarlos ni recogerlos de la escuela, ni vestirlos, ni oler, ni abrazarlos... ', lamentó.
La desesperación de la actriz hizo que llevara su batalla judicial por la custodia de sus hijos a la Casa Blanca. “He recurrido a la Casa Blanca en busca de apoyo político. Quiero que me ayuden a traer mis niños a casa”, dijo. Rutherford contó entonces con el apoyo de numerosas actrices de Hollywood, como Melanie Griffith, Selma Blair, Marcia Cross y Kris Jenner. Entre todas lograron superar las 100.000 firmas necesarias para que la iniciativa de la actriz llegara a la residencia de Obama.
Con esta resolución, Rutherford pone fin a casi siete años de angustia. Todo empezó en 2008, cuando se separó de Daniel Giersch, un alemán dedicado al mundo de los negocios. En aquel momento, el juez dictaminó la custodia compartida de sus hijos, pero cuatro años más tarde la situación se complicó. A Daniel, que entonces residía en Francia, se le impidió la entrada en Estados Unidos, después de que su visa fuera revocada. Un juez de California falló que los niños se quedarían con su padre, ya que éste no podía viajar al país de su exmujer para verlos.
La actriz denunció que el estado de California había deportado inconstitucionalmente a sus hijos pero el fallo no le dio la razón. El tribunal dictaminó que "los niños no han sido deportados” y que “mantienen la ciudadanía de los Estados Unidos" y declaró que no tenía competencia para obligar a los niños a regresar o modificar el acuerdo de custodia. De esta forma, si Rutherford quiere ver a sus hijos debe viajar a Francia.
