Han encandilado desde la gran pantalla y están haciendo lo mismo sobre las tablas de un teatro. Daniel Craig y Rachel Weisz comparten su vida y ahora también los aplausos del público de Broadway que tiene el privilegio de verles en la obra Betrayal. En este montaje, el matrimonio interpreta a una pareja en crisis debido a una infidelidad de ella, nada que ver con su situación personal que es de lo más estable y feliz desde que se casaron en junio de 2011. En una de las primeras funciones se pudo comprobar lo compenetrados que están y lo bien que se encuentran trabajando juntos, al menos eso parece a juzgar por las sonrisas con las que dieron las gracias a los asistentes.
Vestidos de época, como requiere el guión, Daniel y Rachel se cogieron de la mano para saludar al final de la representación. Daniel habló en una entrevista del reto que supone actuar juntos. “Somos personas separadas en el trabajo y somos felices de serlo, no somos una pareja cuando estamos trabajando. No queremos que nos vean así, como una pareja, porque nuestra relación no es asunto de nadie más que nuestro. Subimos juntos al escenario y sabemos que nos estamos exponiendo, pero sólo de modo profesional porque eso es lo que hacemos como actores”, comentó.
Discretos y celosos de su intimidad, los intérpretes no son amigos de prodigarse en eventos públicos. Se conocían desde hace años pero fue al reencontrarse en el rodaje de la cinta Dream House, en 2010, cuando surgió el amor. Tras meses de discreta relación se dieron el “sí quiero” en secreto en junio de 2011. “Me casé en secreto porque mi vida privada es muy importante para mí” declaró poco después el actor que encarna a James Bond.
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