Duelo de bellezas y de curvas fue lo que se vivió en la alfombra roja de los premios Glamour a la mujer del año, una cita en la que se reconoció la labor y el trabajo de 21 mujeres que han aportado su granito de arena para cambiar el mundo. Las investigadoras Shree Bose y Katherine Bomkamp, Taryn Guerrero (que creó The American Widow Project, organización sin ánimo de lucro para prestar ayuda a las viudas de los soldados americanos fallecidos en conflicto) y Kathryn Gray (la mujer más joven en descubrir una supernova), entre otras, fueron algunos de los nombres premiados en una velada en la que la elegancia de las invitadas acaparó los flashes.
Era una noche con nombre femenino y ellas se encargaron de poner el listón muy alto. Jennifer López ejerció de maestra de ceremonias pero no se fue con las manos vacías a casa sino que fue reconocida con el premio All-Star, por su carrera. “Qué noche tan increíble” escribió después en su página de Twitter. Radiante, presumió de curvas con un vestido en color marfil con una hilera de pétalos, lo hombros al descubierto y una sexy abertura inferior. No sonó su nombre entre los premiados pero Jennifer Aniston tampoco faltó a su cita con el glamour. Con un vestido negro, con insinuantes transparencias, la actriz acudió sin su novio Justin Theroux para presentar uno de los galardones. Las dos comparten no sólo nombre sino éxito y belleza, una combinación ganadora sin duda.
Lea Michele, nombrada como “la diva de la puerta de al lado”, llevó un vaporoso vestido color salmón con apliques brillantes y posó del brazo de su compañero de reparto en Glee, Jonathan Groff. Jessica Alba, muy recuperada tras su segunda maternidad, la actriz Emma Stone, el diseñador Marc Jacobs, Wendi Murdoch, Chelsea Handler, Laura Bush y sus dos hijas, que recibieron un galardón en familia, Condoleezza Rice y Lyia Kadebe fueron otras de las asistentes.
