París acogió anoche el estreno de Los idus de marzo, la última cinta del admirado George Clooney, que acaba de ser elegido uno de los hombres más influyentes del año. Además de asistir acompañado de su bella novia, Stacy Keibler, el actor contó con la presencia de una verdadera princesa de cine, Carlota Casiraghi. La hija de Carolina de Mónaco fue la invitada de lujo a la premiere celebrada en la ciudad del amor y sin duda aportó glamour a la cita. Con un vestido estampado con una torerita negra, zapatos de tacón y medias muy tupidas, Carlota posó para los fotógrafos y desfiló hacia la sala del cine UGC Normandie como una estrella iluminada por los cientos de flashes de los fotógrafos. Carlota acudió acompañada por su amiga Virginie Couperie-Eiffel y coincidió en el estreno con el actor Gaspard Ulliel, con quien se le relacionó antes de comenzar a salir con Álex Dellal.
Después de hacer su debut sobre la alfombra roja del Festival de Nueva York, la presión no era tan grande para la novia de Clooney. Stacy, de 32 años, lució para la ocasión un vaporoso vestido de crep de seda de Marchesa, zapatos de Christian Louboutin y como peinado esta vez escogió un recogido que dejaba al descubierto unos pendientes de Amrapali. La modelo, cuyos éxitos en su carrera como luchadora le han dado una fama que le permitió concursar en el programa Dancing with the Stars, no dejó de sonreír a la multitud de asistentes que quisieron felicitarla por su romance con Clooney. A su paso por la alfombra roja, se sucedieron las miradas cómplices y las sonrisas entre esta nueva pareja de cine.
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