La actriz Florinda Chico se despide del teatro protagonizando la obra de Rafael Mendizábal, dirigida por César Diéguez, Que me quiten lo bailao (La Reina castiza), representada en el Teatro López de Ayala de Badajoz. Esta mujer extremeña, trabajadora infatigable, que ha recorrido España escenario a escenario, estudio de cine a estudio de cine, se despide del teatro, orgullosa de su carrera: "Todo lo que he hecho lo he hecho con muchísimo cariño". Se nota en cada actuación y en la vida misma. Una vida, como ella misma dijo, "plagada de sufrimiento y trabajo".
Florinda Chico, con un sentido de la dignidad intacto, ha decidido retirarse del teatro cuando aún se siente "guapa por dentro y por fuera". Ella, secundaria de lujo en decenas de películas españolas, tendría mucho que enseñar a las debutantes a actrices: trabajo, trabajo y trabajo. Ése es el secreto para mantenerse durante décadas sobre los escenarios.
