¿Estás usando bien la máscara de pestañas? Solucionamos los errores más frecuentes

Cómo conseguir un maquillaje de ojos perfecto con este producto casi mágico

Por Amaia León

Desde que es la única zona del rostro que queda a la vista debido a la mascarilla sanitaria, los ojos se han convertido en foco incuestionable de las tendencias de belleza. Los tratamientos que alargan las pestañas y los protocolos de medicina estética para atenuar bolsas y ojeras han crecido en popularidad en los últimos meses, pero en realidad existe algo más rápido y efectivo para tener una mirada más bonita: dominar el maquillaje de ojos. Y si hay un producto capaz de, en dos pasadas, amplificarlos es, sin duda, la máscara de pestañas. No en vano es uno de los productos imprescindibles de todos los profesionales -así nos lo confirmaba Manuele Mameli, el maquillador de Chiara Ferragni- igual que de muchas celebrities y modelos. Por ejemplo, Nieves Álvarez afirma que nunca sale de casa sin aplicarse máscara. Pero, ¿estás utilizándola bien? Los maquilladores revelan los errores más frecuentes al aplicarla y las soluciones más fáciles para conseguir unos ojos preciosos en cuestión de segundos.

VER GALERÍA

- Las 11 máscaras de pestañas más punteras que transforman tu mirada

Cómo encontrar tu máscara perfecta

Lograr un resultado profesional con la máscara de pestañas comienza incluso antes de aplicarla. De hecho, el momento de comprarla es clave porque no todas son iguales y aquí te contábamos nuestra selección de favoritas. Dar con una fórmula adecuada a nuestras necesidades puede ser algo complicado si no conocemos el producto, pero lo que sí es muy sencillo es acertar con el tipo de cepillo. Si quieres unas pestañas más rizadas, elige un aplicador curvo; si buscas más volumen, opta por un cepillo grueso; y si tu objetivo es alargarlas, necesitarás uno con los filamentos separados. ¡Así de sencillo! Por otro lado, para lograr un resultado sutil y discreto, opta por un tono marrón, pero si lo que quieres es intensidad, necesitas una máscara (muy) negra.

Bombear el cepillo ✗

Antes de aplicártela, es esencial confirmar que no está caducada. Debes saber que, de media, las máscaras tienen una vida útil de 6 meses, como puedes comprobar en la etiqueta, aunque es cierto que pueden resecarse antes, con cada uso, si cometes uno de los errores más frecuentes: bombear el cepillo cuando vas a usarla. Aunque creas que metiéndolo y sacándolo del envase logras que el aplicador capture más producto, como explican desde Guerlain, "solo consigue que entre aire y que la textura sea menos cremosa y las pestañas queden apelmazadas". Para evitarlo, "hay que apretar los laterales del envase cuando se saca el cepillo", aconsejan.

VER GALERÍA

Aplicar demasiado producto ✗

Aunque te parezca que cuando más producto apliques, más intensidad conseguirás, lo cierto es que el resultado puede ser el contrario. "El peso extra hace que sea más difícil darles forma y levantarlas y hay una mayor probabilidad de que se formen grumos y queden apelmazadas", avisan desde Guerlain. Si al sacarlo, el aplicador tiene demasiada máscara, sigue el consejo de la maquilladora y youtuber Denitslava Makeup: eliminar el exceso en un papel. Hazlo con cuidado para no dañar las cerdas y asegurándote de que una capa de la fórmula sigue cubriendo todo el cepillo de manera uniforme.

¿En línea recta? ✗

Como las pestañas no son completamente verticales y lo que se busca es curvalas al máximo, el movimiento que describa el cepillo no debe ser recto si no que debe aplicarse en zig-zag. De esta forma, quedarán más separadas y te será más fácil darles una forma curva, una silueta que, como explicaba la maquilladora Cristina Lobato, puedes enfatizar utilizando un rizador previamente. "Es preferible rizar primero con un rizador y maquillar [después] con una máscara que defina y alargue, más que aplicar un exceso de volumen que acabe apelmazando y haciendo, en definitiva, el ojo mucho más pequeño", nos contaba.

VER GALERÍA

- El truco viral del corrector de ojeras con un 'efecto lifting' mágico

Aplicar máscara solo en una cara de las pestañas 

Al contrario de lo que muchas chicas creen, la máscara de pestañas se puede (¡y se debe!) aplicar en ambas caras de las pestañas, es decir, por encima y por debajo. La mayoría de los profesionales comienzan por la parte inferior y después retocan la cara superior, la que queda más cerca al párpado. Si al realizar este segundo movimiento manchas la piel, moja un bastoncillo en agua micelar para borrarlo de forma precisa. Y no te olvides tampoco de las pestañas inferiores ya que, si las maquillas, abrirán al máximo tu mirada. "En ese caso el cepillo debe colocarse a ras de la raíz –con menos producto- y moverlo suavemente de un lado a otro", aconsejan desde Guerlain.

Cuantas más capas, mejor ✗

Es cierto que una sola capa de máscara puede no ser suficiente, pero pasarse puede apelmazar las pestañas, además de manchar el párpado. Por eso, desde Guerlain establecen la cifra exacta en dos capas: "Con una no se consigue rizarlas y con tres lo más seguro es que salgan grumos". Además, muchos expertos aconsejan combinar varias máscaras distintas y utilizar, por ejemplo, una que alargue las pestañas, primero, y otra que aporte volumen, después, aunque esta combinación es personal y solo se consigue, como los mejores maquillajes, de una forma: con la práctica.