Pestañas postizas, el truco mejor guardado de las actrices

Eva Longoria y Selena Gomez son dos de las estrellas de Hollywood que recurren a esta técnica que transforma por completo la mirada, ¿sabes qué estilo te favorecería más?

Por Mariana Chacón

Aunque pruebe con diferentes tonos y acabados, el maquillaje de ojos de Eva Longoria casi siempre incluye un ahumado intenso con el que consigue una mirada de impacto. Las pestañas postizas es otro de los trucos que la actriz pone en práctica desde la época en la que participaba en concursos de belleza, y muchas veces ha asegurado que puede colocárselas dentro de un coche en marcha sin que le tiemble el pulso. Ayer volvió a demostrar que este pequeño gesto marca la diferencia en la gala Empowerment in Entertainment de Los Ángeles, ella y Selena Gomez, pues la segunda también recurrió a los postizos para centrar toda la atención en sus ojos.

Según la manera en la que se colocan las pestañas postizas, pueden redondear, rasgar, e incluso almendrar la forma del ojo. En el caso de Selena, al añadir más densidad y longitud en la parte exterior, logra un efecto felino que termina de enfatizar con el eyeliner negro que utiliza para crear un discreto rabillo. Estas extensiones de quita y pon son también grandes aliadas a la hora de utilizar sombras de ojos coloridas como hace la estrella. Y es que los tonos muy vivos hacen que el ojo quede algo desdibujado, problema que se evita cuando se enmarcan los contornos con un color oscuro.

En lugar de embellecer, las pestañas postizas también pueden tener un efecto contraproducente si no se conocen bien las propias facciones. Por ejemplo, podrían cerrar y empequeñecer la mirada. Este último error es muy común en el caso de que los ojos tengan una tendencia descendente por naturaleza (los llamados ojos caídos) y se coloquen los postizos de la misma forma en la que lo hace Gomez, poniendo énfasis en los extremos, lo que resultaría en una mirada de expresión triste.

Longoria opta por una aplicación más equilibrada que resultaría favorecedora con carácter casi universal pues, aunque es cierto que las pestañas de los extremos son algo más largas que las del interior, este diseño imita la forma natural de las mismas, pero añadiendo más densidad y longitud. Al contrario que las extensiones, en el caso de los postizos sí que se puede utilizar cualquier tipo de máscara de pestañas encima y, según la calidad, también es posible usarlos más de una vez.