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Aunque cubrir las canas, sigue siendo una de las razones fundamentales que nos empujan a teñirnos el pelo, también es verdad que somos muchas las que nos animamos a dar un toque diferente a nuestra imagen no sólo cambiando de corte, sino también recurriendo a la coloración del cabello. Un proceso que, sin duda, no está exento de ‘dificultades’ si tenemos en cuenta que existen un montón de posibilidades a la hora de realizarlo. A todo ello hay que añadir otros ‘problemas colaterales’: por un lado que teñirse lleva tiempo y dinero, tanto si lo realizamos nosotras mismas en casa, como si decidimos acudir a un peluquero profesional; y, por otro, que siempre hay que considerar que el sol, el uso de productos demasiado agresivos o los cuidados equivocados pueden degradar la calidad del color obtenido, de manera que nunca está de más conocer qué debemos hacer para mantener el tono y el brillo del pelo recién teñido. Toma nota de los siguientes consejos:

• Usa siempre champús específicos para cabello coloreado porque reducen el arrastre de los pigmentos de color que se escapan con cada aclarado y, además, incluyen filtros que reducen el efecto decolorante de la luz solar.
• Cada diez días, recurre a un champú con color, que "refresca" la intensidad del tinte o, si lo prefieres, opta por trucos basados en productos naturales. Por ejemplo, puedes realizar el último aclarado con una infusión de camomila, que reaviva el dorado de los cabellos rubios, mientras que el té es perfecto para avivar el castaño o, si tienes el pelo pelirrojo, hazlo con un chorrito de vinagre.
• Si el tono de tu pelo es uniforme y no demasiado diferente a tu color de base, bastará con que retoques las raíces cada mes si, por el contrario, el color está bien contrastado es necesario retocar el color cada veinte días para que el color de tu cabello esté impecable.
• Es importante sanearse las puntas frecuentemente porque cuanto más sano tengas el pelo, más tiempo te durará la coloración.
• Es necesario que incorpores a tu rutina del cuidado del cabello el uso de protectores capilares cuando te expongas al sol. Elige aquellos productos que en su composición base contengan agua y no aceite porque son más eficaces para los cabellos teñidos.
• Usa mascarilla capilar al menos una vez a la semana porque aumenta el brillo del pelo. Aplícala sobre el cabello ligeramente humedecido con agua caliente y envuélvelo, si se puede, con una toalla para que penetre mejor. Ten en cuenta que si hidratas tu cabello, el color penetra mejor y se mantendrá durante más tiempo.
• No es recomendable cambiar de color muy frecuentemente. Cada vez que te tiñes estás cambiando la base del color de tu pelo, por lo que se necesitan más agentes químicos para conseguir el color deseado, de manera que se daña más. Si quieres cambiar, es mejor que lo hagas de una manera gradual, tu pelo te lo agradecerá.
• No abuses del secador. Los secadores, las tenacillas... contribuyen a que esté más poroso y, por tanto, será más difícil mantener el color. Un consejo: cuando lo seques hazlo boca abajo, para que el calor no afecte demasiado al cuero cabelludo.
• En verano, recuerda que siempre que te bañes en el mar o en la piscina debes aclararte el pelo. Es un gesto muy simple, pero que te permitirá tener un pelo brillante.

A continuación, te mostramos una pequeña selección de las últimas novedades para el cuidado de los cabellos coloreados: