La base de maquillaje ha de ser suave, mientras que los ojos pueden ir en rosa y marrón, para conseguir una mirada intensa, pero sin llegar a resultar dura.
Exotismo oriental de geisha. Siendo el maquillador oficial de la película Memorias de una geisha, Max Factor no ha querido prescindir de este look en las propuestas que ha confeccionado para unas novias de fantasía. La belleza oriental radica en una tez delicadamente pálida combinada con unos ojos en tonos naturales, pero remarcando el estilo oriental inconfundible simplemente dibujando un rabillo en el extremo del ojo. Los labios son pura fantasía transformándose en pétalos en el rostro de cada mujer.
Según el maquillador, "se ha realizado un ejercicio de fantasía en este maquillaje, pero con la ventaja de poder aplicar y adaptar a la mujer española los elementos del atractivo y siempre misterioso look oriental". Las claves, un rostro de porcelana, el khol que alarga el trazo del rabillo, y los labios en forma de pétalos de flor, que concentran el color en el centro de los mismos. Un look para las más atrevidas.
Para novias de hoy en día. "Para mí siempre es muy interesante un look de novia sencillo y fresco que muestre a la mujer tal y como es a la vez que potencie sus rasgos. Desde luego, ello no está reñido con el uso de otros elementos tomados de los maquillajes anteriores, debidamente adaptados", explica Ros. La novia del siglo XXI es sencilla, natural y discreta y a la vez sensual y cándida. Es una mujer joven, alegre y desenfadada con un rostro fresco y unos labios jugosos como señas de identidad, que quiere disfrutar al máximo del día de su boda sin tener que preocuparse de su maquillaje durante horas. Y para ella, una base satinada, un toque de rubor en las mejillas, los ojos no demasiado intensos y, para los labios, el efecto mágico del brillo labial en tono rosado, que da un acabado jugoso.