El error que cometen la mayoría de los españoles al comer pan

Sí, existe una forma de disfrutar de este alimento de manera más saludable y sin preocuparte por engordar

Por Mariana Chacón

Pocas dudan de si tomarse un bol de sandía va a estropear su dieta porque sus beneficios para adelgazar ya han sido de sobra demostrados. Tampoco piensan en si prepararse o no una ensalada por miedo a boicotear su plan prebikini, sobre todo si conocen los 5 errores (muy) comunes que disparan las calorías de este plato a priori ultra saludable. Sin embargo, la mayoría de los nutricionistas aseguran que seguir una dieta variada es el mejor método para perder peso, eso sí, elegir los ingredientes adecuados dentro de cada grupo de macronutrientes es la clave para alcanzar ese equilibrio perfecto. Uno de los alimentos más controvertidos en materia de dietas es el pan y es el primero que sale de la vida de todas aquellas que quieren adelgazar, sin embargo, la variedad que eliges podría cambiar este hecho y parece que los españoles llevan mucho tiempo apostando por la opción menos recomendable.

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-Este es el porcentaje de proteína que necesitas en tu dieta para adelgazar más

La encuesta 'Hábitos de consumo de pan en España', realizada por Pan cada día, llegó a la conclusión de que la mayoría de los españoles comen pan a diario. El dato exacto es que 9 de cada 10 lo hacen y el motivo principal es "porque les gusta". Eso sí, mientras que de los 2.000 encuestados un 28,2% eligen las harinas integrales... el ganador por mayoría sigue siendo el pan blanco, que prefiere un 75,1% de la población española. Aunque parece que este básico de la dieta mediterránea mantiene su estatus de imprescindible en las comidas, otra de las conclusiones sacadas del cuestionario es que el 40,9% consume menos cantidad que hace 10 años. ¿El motivo? Porque quieren cuidarse y piensan que el pan engorda. 

Lo cierto es que el pan o la pasta son alimentos con un contenido calórico mucho mayor que el de las verduras, por ejemplo, pero son ricos en hidratos de carbono, fundamentales en cualquier alimentación equilibrada. Por eso no hay que evitarlos, pero sí elegir bien la hora a la que se comen y la variedad: "Siempre que sea posible, recomendamos evitar las harinas refinadas. En el desayuno, puedes tomar una tostada integral o pan de cereales y a medio día si quieres tomar pasta, mejor integral, y siempre que sea posible sustituirlo por arroz o legumbres. Nunca en la cena", explicaban los expertos de la Clínica Dray sobre cómo eliminar la media de 4 kilos que muchas han cogido en la cuarentena. Un consejo que pocos españoles siguen pues, según la encuesta citada más arriba, el 75,1% compra pan blanco, es decir, elaborado con harinas refinadas. 

Además de las recomendaciones de nutricionistas expertos, la ciencia también se interesa en estudiar lo interesante (o no) que resulta el pan para llevar una alimentación saludable. Según un estudio citado por la plataforma especializada WebMD, "las personas que siguen una dieta baja en calorías que incluya harinas integrales, como pan integral, perdieron más grasa abdominal que las que comían la misma cantidad de harinas refinadas, como el pan o el arroz blancos". Algunas versiones, como el pan de Kamut, más rico en proteína, incluso pueden beneficiarte si lo que buscas es ponerte en forma (siempre que lo comas con mesura, por supuesto).

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-¿Y si lo que necesitas para pesar menos es comer más a primera hora?

Aunque la versión integral sean mucho más nutritiva y contenga más vitaminas, minerales o fibra -una sustancia que te mantiene saciada con menos cantidad-, conserva una carga calórica parecida a la blanca, por lo que muchos expertos recomiendan consumirlo por la mañana, cuando necesitas más energía para el resto de la jornada. Como confirma el experto Moncho López, copropietario de las panaderías Levadura Madre: "El pan integral y el pan blanco tienen prácticamente las mismas calorías, la diferencia entre ellos es la fibra que posee el pan integral que además de saciarnos antes, nos ayuda con la digestión, por eso suele recomendarse en las dietas”. 

Otra razón para evitar las harinas refinadas en la medida de lo posible es que es difícil comer poca cantidad, como asegura la experta Heather Bauer, autora del libro Bread is the Devil: Win the Weight Loss Battle by Taking Control of Your Diet Demons: "Nos pasamos con el pan y con otras harinas refinadas. Cuando tenemos hambre, estamos cansados o estresados, tendemos a elegir este tipo de productos en lugar de palitos de zanahoria. El problema es que cuanto más pan comes, más quieres". Por eso, para consumir este alimento tan querido en España y mantener un peso ideal al mismo tiempo, la clave está en elegir la opción y porción adecuadas y evitarlo a partir de la hora de la comida.