Para todas aquellas que se han pasado la vida luchando contra sus rizos, ¡enhorabuena! La moda, ¡por fin! está de su lado. Totalmente. El liso total ha pasado a ser tan sólo una opción más, y todo tipo de ondas, bucles, caracolillos y demás torsiones capilares marcan los nuevos estilos que marcan tendencia. Y es que el pelo rizado no sólo tiene como característica su aspecto ondulado, sino que además es un cabello frágil por naturaleza puesto que cada curva, cada torsión, es un punto débil. Si a eso unimos los intentos, a veces inasequibles al desaliento, de muchas mujeres por alisar el cabello a toda costa, tendremos como resultado un pelo a menudo castigado que necesita mucho, pero que mucho, mimo.
¡ESTO SÍ QUE NO! A EVITAR EN CASO DE RIZOS
No a los estilos muy repeinados y marcados: ponen años. No hay más que pensar en Christina Aguilera con sus aires a lo Marilyn, que endurecen las facciones.
No al corto medio. Tienden a formarse caracolillos poco favorecedores. Es mejor optar por el corto muy corto o el largo.
No a las capas excesivas en caso de rizo muy cerrado o voluminoso. El pelo se vuelve difícil de manejar. Es mejor optar por pocas estratégicamente marcadas.
No a saltarse el acondicionador. Es imprescindible para que el rizo mantenga su tonicidad y no pierda fuerza, además de brillo.
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