10 ideas zen para reconquistar tu vida y tu belleza

Sugerimos diez cambios para el día a día que no cuestan demasiado y cuyos beneficios se notarán en tu paz mental y en tu figura.

Por hola.com
Librarse de trastos viejos
Quien más, quien menos, va acumulando todo tipo de objetos de toda clase y condición. ¿Por qué no meterse a fondo en esos armarios olvidados y deshacerse de trastos inútiles? Librarse de ese peso extra puede ser liberador, y es incluso una de las reglas de oro del Feng Shui.

Estirarse, ¡a fondo!
Primero, algo de ejercicio para entrar en calor: es imprescindible. Después, hacer una tabla completa de estiramientos. ¡Una delicia! El stretching es un placer y proporciona una intensa sensación de bienestar, especialmente en casos de estrés. El secreto es estirar hasta sentir el músculo, pero sin que llegue a doler, y no hacer rebotes, sino movimientos fluidos.

Un peeling médico sin salir de casa
Ya sabemos que el bronceado se va de forma irregular ¡y no siempre favorecedora! Para devolver luminosidad a la piel, nada como los nuevos kits de peelings intensivos, tratamientos intensivos para un mes que proporcionan un cutis más liso y radiante.

Combatir el estrés a través de la dieta
¿Cómo evitar estar estresado en plena vorágine? La alimentación nos puede echar una mano. Es importante seguir un régimen de comidas ordenado y equilibrado, poniendo especial énfasis en consumir alimentos ricos en vitamina A (zanahorias, tomates, espinacas y huevos) y C, así como aquellos en los que abunda la vitamina B (cereales, legumbres, levadura de cerveza, leche), que tienen un efecto relajante sobre el sistema nervioso.

Respirar a fondo
Los chinos afirman que tenemos un número limitado de respiraciones en la vida. Por eso, cuanto más lentamente lo hagamos, más viviremos. Sea cierta o no esa teoría, respirar profundamente mejora el ritmo cardiaco y baja los niveles de ansiedad. Para obtener un relax inmediato, nada como sentarse tranquilamente y concentrarse en la respiración, espirando y aspirando lentamente, sintiendo como el diafragma y el abdomen se mueven a su compás. Por cierto: es un ejercicio excelente para evitar ataques de ira o de mal humor, así como para calmar los nervios.

Añadir antioxidantes extra
El té verde es una de las bebidas más sanas que existen, puesto que tiene una enorme capacidad para combatir los radicales libres, ayuda a quemar calorías, mejora las tasas de colesterol y tiene actividad cardioprotectora. Y si no se le pone azúcar, ¡tampoco engorda! Tomar de dos a cuatro tazas al día (nunca en ayunas) es una excelente forma de medicina natural.

Cuidar un poco la espalda
Parece que nos olvidamos siempre de nuestro soporte principal, ¡hasta que nos duele! Este es un momento tan bueno como cualquier otro para vigilar nuestra postura y, al menor indicio de problema, ponerle remedio. Una buena fuente para consultar es la página web de la Fundación Kovaks (www.webdelaespalda.org), donde se encuentran todo tipo de consejos para evitar lesiones y molestias.

Recordar donde finaliza el cuerpo
Hay que convertir el gesto de hidratar las extremidades en una rutina habitual. Nos ahorraremos ampollas, talones secos y durezas innecesarias. Cuando llega el frío resulta más sencillo cuidarlos porque, al llevar calcetines, se potencia el efecto de la crema al ayudarla a penetrar mejor.

Reclamar un espacio propio
La vida familiar ofrece grandes recompensas, pero a veces hace falta un sitio sólo para una misma, un lugar y un tiempo donde desarrollar el hermoso arte de no hacer nada. En un viejo episodio del Show de Bill Cosby, el mejor regalo que se le hizo jamás a la matriarca del clan fue, ¡una habitación para ella sola con cierre por dentro…! Es importante que, de vez en cuando, cada mujer pueda encontrar un momento y un lugar donde estar a solas, sin interrupciones ni presiones. Y no hay que dudar en negociarlo, ¡o incluso exigirlo!

Dormir más
En un mundo frenético, robamos horas al sueño para cumplir con agendas repletas de todo tipo de actividades y compromiso. Pero es una equivocación que se paga muy cara: dormir poco engorda (sí, como suena, a causa de una hormona llamada leptina que interviene en los procesos del apetito); envejece (el sueño es vital para poner freno a la actividad de los radicales libres) y empeora los procesos de la memoria. La falta de sueño comienza a ser endémica en los países occidentales, y nos hace perder calidad de vida. Así que, menos tele y más cama.