Desde que dejó la pasarela hace ya un año, lo cierto es que el mundo del diseño se había quedado 'huérfano' de una de sus figuras más emblemáticas. Ahora, Tom Ford vuelve con fuerza, pero no demostrando su maestría con la aguja. En alguna ocasión afirmó que quería regresar de forma diferente y, de hecho, fueron muy comentados sus proyectos cinematográficos. Ahora, ha cumplido su palabra y vuelve a la palestra convertido en el flamante fichaje del imperio cosmético Estée Lauder. Es ésta una unión de dos gigantes que se hizo pública ayer, 12 de abril en Nueva York.
"Estoy encantado de trabajar con Aerin Lauder y John Demsey en la creación de la línea Tom Ford, es un proyecto personal que llevaba tiempo rondando en mi cabeza y es un placer poder realizarlo en colaboración con Estée Lauder, el mejor experto del mundo en belleza y fragancias", apuntó el diseñador.
La colaboración, según fuentes de la firma, constará de dos fases: en la primera, la firma cosmética comercializará una nueva línea de productos de belleza "Tom Ford para Estée Lauder" que se distribuirá a partir de la Navidad 2005 en los mostradores de la marca Estée Lauder y se ampliará en la próxima primavera 2006. Más adelante, en otoño 2006, se lanzará nueva línea de cosméticos Tom Ford, independiente y con estatuto de marca propia.
Es la primera vez que la marca Estée Lauder se asocia con un diseñador de moda. Según John Demsey, su presidente, "Tom Ford es un icono de la industria de la moda mientras Estée Lauder es un icono de la industria cosmética. Es por tanto la perfecta combinación de lujo, estilo y belleza". "Tom Ford es un visionario que sabe intuitivamente lo que las consumidoras quieren y sabe cómo comunicar una imagen con impacto y estilo" sigue Aerin Lauder, vicepresidenta de Creatividad de Estée Lauder y nieta de la fundadora Estée. "Estoy encantada de trabajar mano a mano con él y de enriquecer el mundo de Estée Lauder con su punto de vista".
Tom Ford es uno de los diseñadores de moda más respetados y prestigiosos de esta última década. Su sello quedó impreso tras sus 14 años como director creativo de Gucci e Yves Saint Laurent, donde también fueron muy comentados sus trabajos en cosmética, sobre todo en lo que a los anuncios se refiere -su spot de Opium con la modelo Sophie Dahl causó un gran revuelo-. Lo cierto es que todo lo que toca triunfa. Ahora queda comprobar su estrella en esta unión con Estée Lauder.
