Accidentes infantiles: cómo reaccionar ante situaciones de emergencia

Los traumatismos, las quemaduras y la ingestión de sustancias tóxicas son los problemas más frecuentes

Por hola.com

Los más pequeños de la casa suelen ser, por naturaleza, inquietos y revoltosos. A los niños les encanta jugar, correr... y muchos padres saben lo que es que no se estén quietos ni un minuto al día. Esta vitalidad infantil tiene, como no podía ser de otra manera, algunos efectos secundarios, que se materializan en forma de accidentes infantiles, más o menos graves.

Es éste un asunto que preocupa mucho a los padres, y considerarlos como sucesos fortuitos que no se pueden predecir o evitar es un grave error. Así, la responsabilidad de padres y también de educadores ante este grave problema es enorme, y deben saber que la mejor forma de evitar que sucedan es con su prevención. Por ello hay que conocerlos y saber cómo debemos actuar en el caso de que se produzca un accidente, desde el más leve hasta otros más graves. Los traumatismos, las quemaduras y la ingestión de sustancias tóxicas son los tres tipos de accidentes más frecuentes que suelen producirse en el hogar. Se presentan, en la mayor parte de los casos, en niños pequeños, entre el año y los cinco años y, curiosamente, son más frecuentes en los varones.

  • Heridas.
    -¿Qué son?: lesiones de la piel y los tejidos subyacentes causados por un objeto punzante. Se pueden clasificar en abiertas y cerradas, y por su forma de lesionar en: incisas, contusas, incisocontusas, abrasiones y laceraciones.
    -Síntomas: dolor, hemorragia y tumefacción.
    -¿Qué debemos hacer?: detener la hemorragia, prevenir la infección y buscar asistencia médica, en servicios de urgencias pediátricas. Además, no hay que olvidar lavarse las manos antes de limpiar la herida, con agua y jabón. Y, una vez controlada la hemorragia, se debe limpiar la herida con agua corriente y eliminar los cuerpos extraños superficiales. Finalmente, hay que aplicar sobre la herida algún medicamento desinfectante, cubrirla con un apósito estéril y vendarla sin comprimir.