Más que un color de cabello llamativo o un corte de pelo atrevido, lo que, verdaderamente, dota de personalidad a tu rostro son tus cejas. Tu expresión puede cambiar por completo con uno u otro diseño, por eso es fundamental depilarlas de forma correcta. Si te has decidido a hacerlo tú misma en casa, aquí tienes algunos consejos para conseguir un acabado perfecto.
'Tips' para depilar las cejas en casa
Antes de comenzar a depilarte las cejas tienes que prestar atención a varios puntos. El primero, y más importante, es escoger el diseño que más te guste y, sobre todo, que más se adecue a tu rostro, lo mejor que puedes hacer es respetar su forma natural. Una vez visto esto te surgirá una pregunta ¿hasta dónde deben llegar? Tranquila, aquí tienes la respuesta, toma nota.
Para conseguir unas cejas perfectas debes tener en cuenta tres puntos importantes.
- El primero será el inicio de tu ceja, para marcarlo coge un lápiz y alinéalo verticalmente desde el hoyo de tu nariz hasta el hueso de tu ceja, haciéndolo coincidir con el lagrimal ¿lo tienes? Todo lo que sobre hacia el centro debes retirarlo.
- Ahora, ves inclinando el lápiz, cuando lo hayas alineado con el centro de tu iris obtendrás el punto más alto que debe tener tu diseño.
- Por último, para obtener el final del diseño sigue bajando el lápiz hasta la esquina exterior del ojo.
La distancia recomendada que debes dejar entre tus cejas no suele superar un centímetro y medio y el grosor dependerá de tus gustos. En la actualidad, es tendencia las cejas pobladas y salvajes como las de Lily Collins o Cara Delevingne, pero una cosa está clara, tu ceja debe ser más gruesa en su inicio e ir afinándose progresivamente.
Una vez que tengas claro esto, llega el momento de pasar a la acción y, si lo vas a hacer tú sola en casa, puedes recurrir a dos técnicas, las pinzas o la cera. Si te vas a decantar por la cera para depilar tus cejas, hazlo, mejor, con cera caliente y aplícala, siempre, en la dirección opuesta al crecimiento del pelo, después tira de ella en ese sentido. Con esta opción notarás menos dolor, pero tendrás que acabar retocándola, también, con pinzas.
Si te cuesta tolerar ese dolor que causan las pinzas puedes evitarlo recurriendo a varios trucos. El mejor momento para depilarte es justo después de salir de la ducha ya que el vapor y el agua caliente dilatan los poros, esto facilita la extracción del vello haciéndolo menos doloroso. Si se te pasó ese momento, siempre puedes recurrir a otros remedios caseros como envolver varios hielos en un trapo y ponerlo sobre las cejas para insensibilizar la zona. También, puedes hacer tu propia crema anestésica con clavo, machacando un poco y mezclándolo con unas gotas de alcohol. Esta planta tiene un alto contenido de eugenol, componente que resulta anestésico.
Para conseguir un acabado perfecto es importante que cuentes con un peine para cejas y unas tijeras pequeñas. Una vez te hayas depilado debes peinarlas hacia arriba y recortar el vello más largo. Por último, cuando termines, no olvides aplicarte aceite de bebé o aloe vera para calmar la zona enrojecida.
