La estirpe japonesa de los Tanaka

La nueva ministra de Educación de Japón es hija del legendario Kakuei Tanaka, que abrió relaciones con China

Por hola.com

Isidre Ambrós

Cambian las caras, pero permanecen los apellidos. Japón es uno de los países que cuenta con más estirpes familiares políticas y donde los escaños y las circunscripciones se heredan y pasan de padres a hijos.

El último ejemplo lo protagonizó ayer la nueva ministra de Educación, Makiko Tanaka, hija del popular primer ministro de los primeros años setenta, Kakuei Tanaka.

Un político que normalizó las relaciones con China en 1972 y que fue cuatro años a la cárcel por aceptar sobornos de la empresa estadounidense Lockheed.

El primer ministro, Yoshihiko Noda, la nombró ministra de Educación en el marco de una amplia remodelación cuyo objetivo es recobrar la confianza de los electores de cara a las próximas elecciones generales, que podrían celebrarse a finales de año.

La designación de Tanaka, de 68 años, que ya fue ministra de Exteriores en el 2001 y el 2002, se interpreta como un gesto de Noda hacia China.

Y es que esta mujer de lengua afilada y carácter decidido está considerada como una política prochina, que mantiene muy buenas relaciones con los principales líderes de Pekín, fruto de las que tejió su difunto padre en su día.

A través de ella, Noda confía reconducir el diálogo con China. Una relación muy desgastada por el litigio que mantienen ambos países por las islas Senkaku, que los chinos llaman Diaoyu, ricas en recursos pesqueros e hidrocarburos.

Pero el caso del retorno del apellido Tanaka al frente de un ministerio en Japón no es una excepcionalidad, sino más bien al contrario.

En los escaños de las dos cámaras y los despachos de los ministerios es usual encontrar unos nombres que se repiten con el paso de las generaciones.

Es el caso, por ejemplo, del que fue premier entre el 2009 y el 2010, Yukio Hatoyama. A su familia la denominan los Kennedy de Japón y él es la cuarta generación de políticos de la dinastía.

Su antecesor, Taro Aso, también pertenece a otra ilustre familia política. Por parte de madre es nieto de Shigeru Yoshida, el más importante gobernante nipón de la posguerra, que fue primer ministro en 1946-47 y titular de Exteriores en 1948-1954.

El actual líder del opositor Partido Liberal Democrático (PLD) y premier en el 2006-2007, Shinzo Abe, es otro peso pesado.

Representa a la tercera generación de una de las más descollantes dinastías políticas niponas, ya que agrupa a tres influyentes familias: Abe, Kishi y Sato.

Y está, asimismo, el clan de los Koizumi. Shinjiro Koizumi, de 31 años, es la cuarta generación de una dinastía que inició su bisabuelo Matajiro, que fue ministro de Comunicaciones, siguió su abuelo, titular de la Agencia de Defensa, y alcanzó su cenit con su padre, Junichiro, que fue primer ministro entre el 2001 y el 2006.


Leer más noticias en LaVanguardia.com