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El mundo de cine se viste de luto por la muerte a los 88 años de Jean-Paul Belmondo, uno de los rostros más icónicos y carismáticos del séptimo arte francés de todos los tiempos. Eterno seductor, el popular actor galo de origen italiano no solo protagonizó un sinfín de títulos sino que vivió muy intensamente en lo personal, tanto que su propias memorias las llegó a bautizar con el nombre de Mil vidas mejor que una. Nacido en París en 1933, era hijo de un conocido escultor y tuvo dos hermanos, Alain, productor cinematográfico y Muriel, bailarina profesional. Aficionado al fútbol y al boxeo en su juventud, Jean-Paul logró forjarse un físico atlético y una nariz quebrada que le darían no pocas ventajas en su carrera en la gran pantalla, al explotar inteligentemente su peculiar aspecto como pícaro y canalla. De hecho, fue apodado como "el feo más atractivo" del séptimo arte en su país.
Stella, hija pequeña de Belmondo, en el baile de debutantes de París con las hijas de Julio Iglesias
En 1953, se casó a los veinte años con la bailarina Elodie Constantin, con la que tuvo tres hijos, Florence, Patricia (fallecida trágicamente en un incendio) y Paul, pero la pareja acabó divorciándose en 1966. Amigo de otro mito del celuloide francés como es Alain Delon, Jean-Paul interpretó escenas amorosas con grandes estrellas de la época como Gina Lollobrígida, Sofia Loren, Brigitte Bardot o Catherine Deneuve, entre otras. Al parecer, con las dos últimas tuvo algo más que una relación estrictamente profesional y sus idilios en la ficción traspasaron la pantalla. Sin embargo, uno de sus romances más sonados fue con la actriz Úrsula Andress, la que por entonces era catalogada como "mujer más sexy del mundo" gracias a su papel como 'chica Bond'. Sin embargo, fue en 1972 cuando rodando una película conocería a Laura Antonelli, con la que estuvo durante 17 años.
Jean Paul Belmondo, padre de una niña a los 70 años de edad
Después, el incorregible galán del cine francés mantuvo una relación con una mujer brasileña de nombre Carlos Sotto Mayor, cuyo físico impresionó al mismísimo presidente de la República francesa, Jacques Chirac. En 1999, Jean-Paul fue hospitalizado tras sufrir un infarto cerebral y, dos años más tarde, volvió a sufrir un problema similar que le llevó un tiempo a estar en silla de ruedas aunque logró recuperarse bien. En 2002, contrajo matrimonio en segundas nupcias a los 69 con la corista Natty Tardivel, de 41, su compañera desde hacía trece años. En 2008, se divorciaba de su esposa y madre de su hija Stella, niña por la que sentía auténtica devoción. Tras la separación, se enamoró de la belga de 27 años Bárbara Gandolfi, ex 'chica Play-boy' con la que rompería en 2012. Sin duda, la vida sentimental de Jean-Paul Belmondo fue de lo más agitada, lo que casi daría para hacer un película de acción y romance -o serie biopic de varios capítulos- como las que él mismo nos deja en su extenso legado.
Jean Paul Belmondo se casó en París con Natty Tardivel
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