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Kiko Rivera está viviendo momentos muy complicados que han llevado a una ruptura de la relación con su madre Isabel Pantoja. Todo ello, en medio de una tormenta mediática que el pasado viernes alcanzaba su punto álgido en un programa especial sobre la herencia de Paquirri, en el que su hijo menor acusaba a la cantante de no haber respetado las últimas voluntades del torero y de anteponer el dinero a sus hijos. Un día después de hacer estas duras declaraciones, vemos las primeras imágenes del DJ, junto a su mujer, Irene Rosales, su principal apoyo, tratando de relajarse por Madrid en plena vorágine.
- Kiko desvela el detonante de la ruptura con su madre
La pareja salía del hotel en el que se encuentran alojados para cenar a un restaurante de la capital en medio de una gran expectación mediática. Protegidos por mascarillas, se metían en un taxi dispuestos a desconectar al menos durante unas horas y a disfrutar de su compañía. Irene, con leggings rojos y abrigo negro, estaba en todo momento muy pendiente del móvil y de su marido, que con su característica gorra y unos vaqueros muy informales, mostraba un semblante serio y cabizbajo.
Su mujer está siendo más que nunca el pilar fundamental de su vida. La sevillana, que siempre se ha mantenido prudente intentando no echar más leña al fuego en ningún momento, reconocía este sábado en el programa Viva la vida que no esperaba que su marido iba a llegar al punto en el que se encuentra ahora ni a hablar así de su madre. Siempre a su lado, se muestra, no obstante, más optimista y considera que lo que ambos necesitan es tiempo, aunque tampoco se atreve a hablar de reconciliación. Ella entiende el dolor del DJ y tampoco tiene contacto alguno con Isabel desde hace semanas, aunque siempre se habían llevado muy bien. Aún así, ha dejado claro que pase lo que pase no quiere que sus niñas se vean afectadas por toda esta tensión familiar y que su abuela puede verlas siempre que quiera.
La relación con sus hermanos
Irene también ha aclarado la actual relación que mantiene Kiko con sus hermanos Francisco y Cayetano, después de que éstos le hayan mostrado públicamente su apoyo. "No le empujan a que tengan un enfrentamiento con la madre, lo que hacen es apoyarlo en su sufrimiento y aliviarlo. Estos días han tenido conversaciones y de hecho hoy creo que han hablado también", explicaba. El mayor de los Rivera llamó al programa muy emocionado para agradecerle su valentía y hacerle saber, entre lágrimas, que creía que su padre estaría "muy orgulloso" de él. También su esposa, Lourdes Montes, ha contado en una entrevista en La Razón, cómo está viviendo esta situación: "Siempre es triste ver como una madre y un hijo se llevan mal. Siento mucho que Kiko esté pasando por este trance".
Kiko Rivera, por su parte, ha agradecido todos los mensajes de apoyo recibidos después de publicar unas desgarradoras palabras que reflejan a la perfección su estado de ánimo después de la complicada noche que ha vivido. "Muchas veces en mi vida me enfadé con el mundo, sentí odio por mí mismo o culpabilicé a los demás por lo que me ocurría. Conozco la desesperación, las noches horribles de insomnio, las drogas y las pastillas para dormir, el vacío y la sensación espantosa de que nada tiene sentido. Sé lo que es tener el corazón roto. Conozco muy bien el miedo, la ansiedad, la ira y el resentimiento...", escribió junto a una foto suya en actitud pensativa.
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