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La gran hazaña conseguida este domingo por Rafa Nadal en París no solo ha provocado el aplauso de todo un país, sino que también le ha valido la concesión del mayor reconocimiento del Estado para un deportista. Después de ganar su decimotercer Roland Garros igualando los 20 grand slams ganados por Roger Federer, el Gobierno ha acordado condecorarle con la Gran Cruz de la Orden del Mérito Deportivo.
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“Nos honra el trasladarle esta distinción no sólo por los méritos deportivos indudables de uno de los mejores deportistas de la historia no sólo de España, sino a nivel internacional”, ha afirmado María Jesús Montero, portavoz del Gobierno, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en el que se ha aprobado este reconocimiento, "sin duda, merecidísimo para uno de nuestros orgullos nacionales". Nadal consigue así a los 34 años el tratamiento de 'excelentísimo' que va a aparejado a esta distinción, que también han recibido otros tenistas como Manolo Santana, Arantxa Sánchez Vicario o Conchita Martínez. También los futbolistas Xavi hernández, Andrés Iniesta o Iker Casillas, así como el exseleccionador nacional, Vicente del Bosque han sido reconocidos con la Gran Cruz.
A pesar de la cantidad de éxitos que acumula, esta última victoria en París le ha sabido especialmente bien al manacorí, que volvía a las pistas tras los meses de parón obligado debido a la crisis del coronavirus. En alguna ocasión, había comentado lo duro que le había resultado en algunos momentos el confinamiento al no disponer de cancha en su casa para entrenar. Sin embargo, su regreso no ha podido ser más triunfal y Rafa abrazaba este domingo emocionado la copa que le volvía a coronar como el invencible rey de la tierra batida. Mientras culminaba su gran logro, desde las gradas sus padres, Ana María Perera y Sebastián Nadal, su hermana Maribel, y su esposa, Mery Perelló, ejercían de auténticos talismanes. Hacia ellos corrió una vez concluidas las tres intensas horas de partido para fundirse en un abrazo y darle un efusivo beso a su mujer, con la que el próximo día 19 de octubre celebrará su primer aniversario de casados.
Tras la victoria, la celebración tuvo que ser más contenida que en años anteriores debido a la complicada situación sanitaria. “No voy a hacer nada, no va a haber fiesta porque no son épocas para hacerla, me iré con mi familia”, dijo en el programa Tiempo de juego, de Cadena Cope. Se desconoce el lugar que el tenista eligió para brindar con sus allegados en la capital francesa, pero normalmente suele hacerlo en el restaurante Café de la Paix, donde degustan las propuestas del chef Laurent André, quien en otras ocasiones le ha sorprendido con una tarta personalizada con velas y pelotas de tenis.
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