Después de varios días de ausencia, Mila Ximénez desvelaba entre lágrimas en Sálvame que sufre cáncer de pulmón, dejando a sus compañeros conmocionados por la noticia. Las últimas apariciones de la colaboradora, que es una de las más polémicas del programa, habían estado cargadas de enfrentamientos con Lydia Lozando, pero durante su llamada telefónica se han dejado claro la una a la otra que aquello pasa a un segundo plano. La periodista le decía a su amiga que estaba ahí para ella en todo lo que necesitara, y ambas lloraban al insistir en que la sevillana podría salir de este trance gracias a su encomiable fuerza, que nunca ha faltado en su carácter.
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Lydia no ha sido la única en intervenir para mandar lo mejores deseos y todo el cariño a Mila. También lo ha hecho Kiko Hernández, que es uno de los participantes en el magazine de Mediaset con los que la sevillana tiene una mejor relación. El colaborador hablaba con dificultad, por la emoción, para expresar el amor que sentía por su compañera, admirándola y diciendo que siempre iba a estar junto a ella. "Este viaje te agarro la mano muy fuerte y no te la suelto", afirmaba conmovido. Además, le aseguraba que sabe que tiene agallas, que es muy valiente, que tiene mucho coraje... pero le decía que pida ayuda: "Vamos a estar contigo, tenemos que matar al bicho este, te quiero, te adoro, voy a estar contigo hasta que se me acaben las fuerzas".
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María Patiño intervenía en el programa también de manera telemática y se mostraba tan afectada que apenas podía hablar. Ha podido reponerse al escuchar su ya característica canción No dejes de soñar. "Lo vamos a hacer luchando, ¿y sabes cómo? Ella tiene que poner de su parte pero si le damos cariño, se siente arropada, eso le va a dar tanta fuerza o mucha más que la medicación que le van a dar los médicos", decía la periodista al conseguir recuperarse del disgusto y aún con la voz temblorosa. "Estoy convencida porque lo sé, igual que intuía que pasaba algo y no tuve el coraje de afrontarlo contigo, tengo clarísimo Mila, porque lo sé, que esto es un pequeño obstáculo", añadía. "Os prometo que no voy a tirar la toalla", le respondía su compañera, a la que incluso consiguieron sacar algunas risas.
También Kiko Matamoros, que no se encontraba presente en el plató en ese momento, entraba en una conexión telefónica para trasladarle todo su amor y cariño a su compañera. Jorge Javier, que se mantuvo firme pese a que tenía los ojos llorosos, consiguió hacer reír a Mila al quejarse de que a él no le habían invitado, el día anterior, a casa de la colaboradora. Al parecer en su hogar estuvieron Terelu o Belén Esteban, que han sido un apoyo para ella. La de Paracuellos del Jarama le ha regalado incluso una estampita de su santo de devoción, San Judas Tadeo, a quien ya rezó para la recuperación del presentador cuando tuvo un ictus el pasado año.
En el plató estaba Gema López, que no ha podido evitar emocionarse, llegando a taparse la cara, mientras Mila contaba la noticia y el tratamiento que debía seguir. Además, reiteraba lo dicho por Kiko, pidiéndole a Mila que no tuviera miedo a ser vulnerable durante este proceso: "Has dicho 1. quiero vivir y 2. he salido de cosas mucho más duras que esto. Yo creo que eres cabezota, que tienes agallas, esa es la actitud. Pero estoy de acuerdo con Kiko y no tienes que ir siempre de batalla por el mundo". El resto de colaboradores presentes en el estudio, Laura Fa, Rafa Mora o Alonso Caparrós le mandaron también a la colaboradora todo su cariño y su apoyo y le insistieron en que estaban siempre ahí para cuando les pudieran necesitar, ante lo que ella se mostraba aún más emocionada.
