Quedan muy pocas semanas que Inés Arrimadas se convierta en madre por primera vez, y aunque la política está viviendo esta recta final del embarazo de una manera atípica y muy diferente a como lo había imaginado, ella misma ha explicado que se encuentra tranquila y cumpliendo el aislamiento marcado por las autoridades para luchar contra la emergencia saniaria causada por el COVID-19. La presidenta de Ciudadanos y portavoz de esta misma formación en el Congreso de los Diputados sigue adelante con sus compromisos profesionales y cada día hace reuniones virtuales con sus compañeros de partido para abordar los temas de actualidad y buscar posibles soluciones. "Reuniones diarias en tiempos de coronavirus", ha dicho junto a una imagen en la que se puede ver a otros políticos como Gema Fariñas, Marina Bravo o Susana León.
Además, en esta cuarentena, Arrimadas también disfruta de la compañía y los mimos de su familia tal y como ha mostrado en una foto captada por su marido, Xavier Cima. En la intimidad de su hogar, sentada en el sofá, presume de barriguita con una ajustada camiseta negra de cuello alto y se deja mimar por su perrita, Suiti. Una pinscher que se apoya tiernamente sobre ella mientras la política la acaricia y la mira con ternura. El único mensaje que ha compartido junto a esta instantánea es un emoticono de corazón que dice más que muchas palabras. Eso sí, familiares, amigos y compañeros como el Portavoz del Gobierno de la Comunidad, Ignacio Aguado, han reaccionado a esta bonita estampa con comentarios de ánimo que, en su mayoría, le desean lo mejor para la nueva etapa a la que está a punto de dar la bienvenida con la maternidad.
Precisamente del embarazo hablaba Inés Arrimadas hace solo unas horas. En una charla virtual con Espejo Público, la política catalana de 38 años le explicaba a Susanna Griso las medidas que ha tomado en estas últimas semanas de gestación. “Al ser colectivo de riesgo me han aconsejado que cumpla el confinamiento. Hay que confiar en el sistema sanitario”, decía, relatando además que su marido y ella han "dejado para el final las cosas del niño. No sé cómo saldrá, seguro que sale bien”, comentaba muy optimista.
En una de las entrevistas que ha dado durante su embarazo, Inés ha dado a entender que el bebé que viene en camino es un niño ya que se ha referido a él como "el nene". Su hijo pondrá el broche de oro a una relación con Xavier Cima que comenzó en 2012, cuando sus caminos se cruzaron en el Parlament de Cataluña -él era diputado de Convergència-. Cuatro años después se dieron el "sí, quiero" en una romántica boda civil celebrada en Jerez de la Frontera y oficiada por Carlos Pérez. Después, los contrayentes brindaron por su amor con más de 200 invitados en la Hacienda Vistahermosa, un caserío de 1844 con tres salones interiores, un patio de naranjos, un jardín y un mirador al viñedo.
