Raquel Mosquera se encargaba de abrir la semana pasada una nueva entrega de Ven a Cenar Conmigo Gourmet en Telecinco. La peluquera organizó una emotiva velada en la que recordó su historia de amor con el difunto campeón de boxeo Pedro Carrasco y preparó una serie de platos 'de batalla' que no convencieron a sus comensales. A pesar de ser vegana y de no haber podido comer nada más que el postre, Rosa López otorgó a Raquel un 9 en las puntuaciones. Esta noche, la ganadora de la primera edición de Operación Triunfo se ha puesto al mando de los fogones y ha preparado un menú libre de productos de origen animal.
Como primer plato Rosa preparó 'la madre que me parió’, una sopa que solían preparar su abuela y su madre con patatas, acelgas, ajo, almendra y pan frito; como plato principal, elaboró un plato al que denominó 'Andalucía del mañana', y que estaba compuesto por 'carne' vegetal, acompañada de verduras y plátano frito. La cantante preparó también cuscús como acompañamiento, aunque lo hizó horas antes de servirlo y acabó convertido en una masa pastosa que acabó tirando a la basura. Para compensar este accidente culinario, Rosa preparó un 'green paradise', una especie de tarta de queso elaborada con pasas, nueces, crema de aguacate y cilantro, que acompañó con helado de arándanos.
Laura M. Flores volvió a ser la invitada más crítica de la noche. La influencer criticó duramente todos los platos de su anfitriona y se sinceró diciendo que no le gustaban sus platos y que no entendía la combinación de sabores, especias e ingredientes que esta utilizaba. Francisco tampoco se cortó y aseguró que no le había gustado nada la experiencia vegana y que no iba a sacrificar más sabores reales por otros sustitutos. Raquel y Aless Gibaja, no obstante, fueron más benevolentes con ella.
La casa de Rosa estaba llena de recuerdos de su paso por OT. Además de fotografías con sus compañeros de edición, la cantante tenía enmarcada la carta de admisión a la Academia. "Ese trozo de folio tiene lo más importante de mi vida", decía la cantante recordando su paso por el talent. Como colofón final a la cena, todos realizamos una coreografía en la que recordaron el paso de la cantante por Eurovisión. Al son de Europe’s living a celebration, los comensales se pusieron en la piel de Bustamante, Bisbal, Geno, Chenoa y, mientras le hacían los coros a Rosa, esta cantaba la popular canción con la que representó a España en el año 2002.
Durante la velada, el amor y las relaciones volvieron a ser protagonistas. La cantante de Operación Triunfo manifestó sus ganas de enamorarse y de encontrar a un compañero de vida. "Nos dejamos llevar demasiado por lo superficial y no por una caricia. No de la piel, si no del alma", comentaba emocionada. "Creo que el amor es lo más importante en todos los aspectos de la vida", añadía más tarde. Para cerrar la noche, Rosa inventó un juego en el que tapó los ojos a sus invitados e intentó que el amor fluyese y que se besasen, pero fue todo un fracaso. En cuanto a las votaciones, Francisco quiso aprobar a Rosa con un 5, Raquel puntuó con un notable 8 y Aless le otorgó un 6. Laura volvió a dar la nota más baja de la noche y calificó a la anfitriona con un 3. El total de puntos, 22, coloca - de momento- a la artista en segunda posición por detrás de Raquel, que logró un total de 26 durante su cena.
