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El día ha llegado. Los aficionados a las corridas, en general, y al toreo de Jesulín de Ubrique, en particular, están de enhorabuena. Este domingo por la tarde, el diestro ha vuelto a vestir su traje de luces para deleite de sus seguidores y se ha lanzado al ruedo de la plaza de Morón de la Frontera, en Sevilla, sin atisbo de duda en su rostro, aunque sí con cierta emoción, la misma que le llevó a reaparecer el pasado mes de agosto en Cuenca tras siete años en los que solo se había dejado ver en contadas ocasiones en el coso taurino.
Su vuelta, como aquella vez, ha estado rodeada de una gran expectación. Sobre todo, desde que se supo que su esposa, María José Campanario, iba a estar a su lado en tan esperado regreso. Hacía varios meses que la odontóloga, que ha estado acompañada por amigas, no se dejaba ver en público. Sonriente y con muy buen aspecto, Campanario ha seguido muy atenta cada uno de los pases de su marido. Este mediodía ambos llegaban a Morón junto al hermano pequeño del diestro, Víctor Janeiro, así como la mujer de este, Beatriz Trapote. La madre del torero, Carmen Bazán, y la modelo y presentadora Eva González tampoco se han querido perder el evento taurino y han sido dos de los rostros conocidos que se han acercado hasta la plaza propiedad de Manuel Morilla, quien por cierto fue apoderado de Jesulín.
El de Ubrique se encuentra en plena cuenta atrás para celebrar el trigésimo aniversario de su alternativa, tomada el 21 de septiembre de 1990 en la plaza francesa de Nimes junto a José María Manzanares. Este domingo han sido Pablo Aguado y Cayetano Rivera sus compañeros de cartel. Los tres han lidiado toros de la ganadería El Torero. "El hecho de torear el año pasado en Cuenca me motivó para tomar el pulso de lo que quería hacer y cómo lo quería hacer. Y me fui contento, aprobé el examen con una nota relativamente buena", comentaba hace unos días durante la rueda de prensa en la que habló de su esperado regreso.
Pese al elevado caché que ha recibido por esta tarde de toros en Morón de la Frontera -52.000 euros-, Jesulín de Ubrique tiene claro que esta faena no supone su inmediato regreso a los ruedos, ya que en su mente está ese aniversario que le espera a la puerta de la esquina. "En principio mi idea es terminar esta corrida y seguir con mi entrenamiento, que lo necesito. Mi objetivo es reaparecer, si me encuentro en plenitud de facultades, en 2010, coincidiendo con mis 30 años", explicaba hace unos días. Curiosamente el aniversario de la alternativa de Jesulín coincide con el 25º de la de Francisco Rivera, de la que el de Ubrique fue testigo.
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