Entre la Provenza y Puglia: así están siendo las vacaciones del exministro Màxim Huerta

El escritor valenciano ha viajado a Francia e Italia, pero también ha querido disfrutar de su tierra natal y de su familia

Por Alba G. Salas

Tras un inicio de año marcado por las buenas y malas noticias, Màxim Huerta ha querido aprovechar el verano para descansar y desconectar. Días de mucho sol, mar y arena que se han mezclado con viajes a lugares especiales aún por descubrir para el escritor. “Viajar. Asimilar horizontes. Huir de lo viejo. Arrancarse de lo conocido. Beber lo que viene. Tener alma de proa”, publicaba a principios de julio utilizando una frase del poeta argentino Ricardo Güiraldes como pie de foto de uno de sus álbumes de vacaciones.

Tras ello, el exministro de Cultura y Deporte ha disfrutado de estos meses de verano en diferentes puntos de Europa y rodeado de distintos amigos. Italia, más concretamente la región de Puglia, ha sido el último destino del alicantino, que ha mostrado su felicidad al visitar lugares tan impresionantes como Alberobello, un enclave declarado Patrimonio de la Humanidad por sus características construcciones en piedra. Además, ha podido degustar la clásica y siempre perfecta gastronomía italiana, compuesta principalmente por pasta y pizza, optando en este caso por la segunda opción. "Hoy, pizza", escribía junto a una imagen en la que se le puede ver con una caja para llevar. 

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Antes de este viaje, Màxim escogía la Costa Azul para pasar unos días acompañado de una amiga. El exministro socialista viajaba a la Provenza y allí, en sus calles, surcando las cristalinas aguas francesas y paseando por los campos de lavanda, nos descubría uno de sus hobbies: pintar. "Me gusta dibujar. Lo hago desde niño. Había un pintor en mi pueblo, Juan Mora, que me dejaba estar en su atelier todas las tardes. De aquellos carboncillos, óleos y aromas de aguarrás quedan muchos recuerdos y esta afición que veis: dibujar los lugares que visito", escribía junto a varias de sus obras. 

Pero Màxim también ha tenido tiempo de descansar en su tierra natal y disfrutar con su familia y amigos. De hecho, era su perrita Leo quien se encargaba de dar el parte de la 'familia Huerta': "Doña Leo, como portavoz de la familia Huerta, os comunica que todo va bien. Que MH dibuja, pinta, hace la siesta y ya ha revisado el nuevo libro que publicará en octubre. De temperatura y temperamento, ídem. Todo bien. Pd.: pasea y toma cañas", bromeaba.

Lo cierto es que estos últimos meses no han sido fáciles para el escritor. Convertirse en el ministro más breve de la historia, al dimitir después de una semana en su cargo tras hacerse pública la sentencia que le condenaba a pagar Hacienda, no fue un trago agradable. Poco más de dos meses después de aquella decisión, revela lo importante que ha sido su madre en esta etapa. "Gracias por llevarme en brazos, enseñarme a andar, a leer, a dibujar, por dejarme volar y, como en esa vieja foto, volver a agarrarme en brazos este último tiempo. Nada ha sido fácil. Lo sabemos bien. Solo quererte. Que las heridas sean sólo anécdotas", escribía recientemente para felicitarla. Sin embargo, parece que aquello acabó y que nuevas tiempos y proyectos llegarán a la vida de Màxim.