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Desde que se diesen el "sí, quiero" el pasado mes de diciembre, Ana Boyer y Fernando Verdasco apenas se han separado. La complicada agenda profesional que tiene el tenista no ha impedido que la pareja pase sus primeros meses de casados juntos, ya que la hija de Isabel Preysler intenta acompañarle siempre que puede en sus viajes. El último destino del matrimonio, Mónaco, donde el deportista disputa el Masters 1000, ha coincidido con el 29 cumpleaños de la joven. "Feliz cumpleaños ❤️👫 #tedeseolomejordelmundo", ha escrito Verdasco en su cuenta oficial de Instagram junto a una imagen de ambos paseando por las calles del Principado.
De hecho, ayer Ana, ante los nervios previos de la fecha, no podía evitar subir una instantánea a Instagram buscando el presente de su chico: "Cuando se acerca tu cumple y sabes que tu regalo está escondido en la habitación...", escribía junto a una fotografía en la que aparece pensativa. Aunque ya días antes la pareja había dado muestras de su estancia en Mónaco gracias, donde, entre entrenamiento y entrenamiento, han tenido tiempo para pasar tiempo juntos e, incluso, que Ana aprenda de manos del tenista a manejar la raqueta. "Me ha tocado clase de @ferverdasco 🤗❤️", ponía como pie de foto a una imagen en la que aparece en la cancha. Las clases de su chico parecen estar perfeccionando uno de los grandes hobbies de Ana. "Poquito a poco", respondía la hija de Miguel Boyer e Isabel Preysler ante la pregunta de un usuario sobre cómo se le daba.
Mónaco es la última parada de esta eterna luna de miel de la pareja. Y es que, alrededor del mundo, Ana y Fernando dan muestras de su amor en cada lugar del mundo al que viaja. Brasil, Bahamas o Madrid, donde pudimos verles hace unos días conpartiendo una noche de Champions desde uno de los palcos del Santiago Bernabéu, son algunos de los destinos que han disfrutado juntos. Todo ello, sin olvidar Doha, el lugar en el que ambos decidieron establecer su residencia incluso antes de casarse.
Allí pasaron sus primeras semanas de matrimonio y es allí donde tienen su base de operaciones, aunque continuamente viajen por el mundo debido a los torneos en los que ha de competir el tenista y a los que le acompaña Ana Boyer, quien se ha convertido en su mejor fan y su mayor apoyo.
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