Tom Cruise tuvo el honor de conocer al Duque de Edimburgo en una cena benéfica celebrada en el palacio de Buckingham para conmemorar el 75 aniversario de la Outward Bound Trust. Esta conocida organización de caridad, que ofrece entrenamiento de supervivencia y actividades al aire libre para jóvenes desempleados o con discapacidades, es apadrinada por el marido de Isabel II desde el año 1999, y este año con motivo de su aniversario la cena de gala contó entre sus célebres invitados con la estrella de Misión imposible.
Su encuentro en Palacio fue distendido y muy divertido porque si por algo siempre el duque de Edimburgo es por su espontaneidad y buen sentido del humor. Tom Cruise, de 54 años, y el príncipe Felipe, de 95, compartieron bromas e intercambiaron risas como si de dos amigos se tratase. Durante su conversación el actor se mostró muy relajado, incluso en un momento se llevó las manos a los bolsillos. El Palacio de Buckingham comentó que "fue invitado como colaborador con la organización Outward Bound Trust.
Elegantemente vestidos para la ocasión, con esmoquín y pajarita, se saludaron con un apretón de manos y después vino su amigable conversación. "Fue una maravillosa tarde por una buena causa", comentó una fuente cercana a Cruise a la revista People y añadió: “Se lo pasó muy bien”. Y es que durante más de 60 años, el Duque de Edimburgo ha hecho gala de su carácter bromista durante muchos de sus compromisos.
