Falleció el pasado septiembre a los 90 años

¡Millonaria por sorpresa!: la secretaria del 'rey de los supermercados' italiano hereda 75 millones de euros

Bernardo Caprotti, propietario de la cadena Esselunga, ha dejado a la que fue su mano derecha de los últimos 40 años la mitad de su fortuna en agradecimiento por su 'extraordinaria ayuda'

Por hola.com

El nombre de Bernardo Caprotti era uno de los más reconocidos en los círculos empresariales italianos dado que era el propietario y fundador de la cadena de supermercados Esselunga. Este “rey de los supermercados” como se le conocía en el país producía con sus 152 tiendas de alimentación, informa Il Corriere della Sera, unos 8 millones de dólares (más de 7 millones de euros) en ingresos y tiene unos 22.000 empleados. Su muerte, el pasado 30 de septiembre, a los noventa años de edad ha sacado a la luz sus últimas voluntades, y ha sido este testamento el que ha revolucionado los titulares.

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¿El motivo? Entre sus herederos figura la que fue su asistente, secretaria y mano derecha durante cuarenta años, Germana Nails (de 68 años) a la que ha dejado una cantidad de 75 millones euros, razón por la que se la ha bautizado como “la secretaria de los 75 millones de euros”. La prensa italiana recalca que es una mujer discreta y entregada a su trabajo, a la que su jefe conocía de toda la vida, y que ha desempeñado un papel clave en algunas de las decisiones estratégicas de la empresa. También parece que fue un gran apoyo en temas personales, cuando el magnate tuvo conflictos con sus hijos por ejemplo. Ella recibe la mitad de la fortuna de este empresario -asciende a unos 150 millones de euros en efectivo-, que se suma a los diez millones que fue recibiendo en vida de Caprotti (entre 2006 y 2009). El empresario le da las gracias en el testamento por su labor: “Le expreso mi gran agradecimiento por la extraordinaria ayuda”.

El resto del dinero se repartirá entre los cinco nietos del empresario, 15 millones para cada uno, y los bienes se los ha legado a su viuda, su segunda esposa Juliana Albera, y a la hija nacida de esta unión Marina Sylvia –herederas universales-, y  a sus hijos José y Violetta, de su primer matrimonio, que reciben la parte legítima que les corresponde. Y es que además del dinero en efectivo que tenía en el banco y las acciones de la empresa, su fortuna abarcaba mucho más.

Entre sus propiedades inmobiliarias figuran el castillo Bursinel, conocido como el Castillo de los Caballeros, situado en Ginebra (Suiza), con sus terrenos, viñedos y bosques que abarcan un total de 45 hectáreas, y que el fallecido define en el testamento como “la propiedad que es más querida para mí”; una casa en el centro de la ciudad de Milán, otra en la Quinta Avenida de Nueva York; un apartamento en el Golf Club Monticello en Cassina Rizzardi, en la provincia de Como, otro en Verbier en Suiza y la villa de la familia en Albiate (cerca deMilán); una residencia en Skiathos, en las islas griegas, y un terreno en el sur de Córcega.

Obras de arte como Mujer en la ventana, de Zandomeneghi, dos pinturas de Mario Nuzzi (que son también para Germana Nails), el cuadro Rosas blancas de Fantin-Latour, una naturaleza muerta de Chirico, y el cuadro de Manet, La virgen con el conejo blanco, que se expone en el Louvre -se quedará en el museo siempre que se exponga junto al original de Tiziano, que fue la inspiración del pintor francés-. Un coche de la marca Bentley, un barco bautizado como Alfamarine y una biblioteca de más de 4.000 volumenes, completan su legado.