Esther Cañadas es una habitual de uno de los destinos estrella cada verano. Las islas Pitiusas se convierten en punto de encuentro de numerosos rostros conocidos que aprovechan sus vacaciones para relajarse en la playa, broncear su piel y refrescarse de las altas temperaturas con un buen baño. Este verano, la modelo también ha elegida Ibiza para descansar en compañía de su hija, Galia, que el próximo mes de diciembre cumplirá dos años.
Madre e hija disfrutaron de un agradable día en la playa, esta vez pasaron la jornada en la isla vecina, Formentera. Esther se mostró pendiente en todo momento de su pequeña, vigilando todos sus movimientos y mostrándose muy cariñosa con ella. La niña, con un bañador rosa a juego con sus manguitos, se divirtió jugando en la arena mientras recibía los mimos de su orgullosa máma.
Tras disfrutar de la playa, Esther, que llevaba un bikini negro, se puso un vestido de crochet y cogió en brazos a su niña para subir a bordo de un yate en el que pasó el resto de la jornada navegando. Además, la modelo contó con la ayuda de una niñera.
Sin duda, la pequeña se ha convertido en la niña de sus ojos. Esther Cañadas cumplió su sueño de ser madre en diciembre del 2014, desde entonces se ha volcado en la maternidad. La que fue una de las grandes tops internacionales cumplía este deseo tras superar una enfermedad del sistema inmunológico, que la obligó a estar medicada con cortisona durante cinco años.
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El nombre completo de la pequeña es Galia Santina y Esther no ha desvelado la identidad de su padre. Además, tampoco se sabe nada de su situación sentimental desde que rompiera su compromiso con Vikram Chatwal. Tras su divorcio de Mark Vanderloo en el año 2000, y del exmotociclista Sete Gibernau, en 2008, la modelo se comprometió con el magnate hotelero, con quien rompería meses más tarde. Ahora solo tiene ojos para su niña.
