Jennifer Aniston y Justin Theroux se daban el “sí, quiero” en la noche del pasado miércoles, 5 de agosto, ante la sorpresa de todos sus familiares y amigos que pensaban que iban a acudir a la fiesta de cumpleaños del actor. Una esperada boda que ha llegado tres años después del anuncio de compromiso de la pareja. Los recién casados no han querido esperar para disfrutar de la luna de miel. Un día después del enlace fueron fotografiados tomando un jet privado para poner rumbo a uno de los destinos preferidos por los enamorados: la Polinesia Francesa, concretamente a la isla de Bora Bora.
Ambos iban totalmente de incógnito, Jennifer llevaba una camiseta de rayas y una pamela con la que intentaba ocultar su rostro, Justin también utilizó un sombrero. Las paradisíacas playas de arena blanca de la isla y sus cálidas aguas de color turquesa están siendo el escenario de sus primeros días como casados. El matrimonio fue fotografiado llegando a Bora Bora, pero intentaron pasar desapercibidos. Han elegido el lujoso resort cinco estrellas Four Seasons, localizado en una de las zonas más bellas de la isla. Este alojamiento es conocido por sus cabañas sobre el agua donde se encuentran suites con todas las comodidades. Además, el lugar cumple con una de las exigencias de la pareja: les ofrece la máxima privacidad.
El resort cuenta con un amplio abanico de actividades para disfrutar de la belleza de Bora Bora como paseos en barco o excursiones para ver la salvaje naturaleza de la zona. Una semana de estancia para dos puede llegar a costar casi un millón de euros.
Ya se conocen más detalles de la boda secreta que tuvo lugar en la casa de la actriz en Los Ángeles, ubicada concretamente en el prestigioso barrio de Bel Air, una gran mansión con piscina que cuenta con un extenso terreno. Alrededor de 70 personas se reunieron para el gran día, entre los que había muchos rostros conocidos como las compañeras de la actriz en la serie Friends, Lisa Kudrow y Courteney Cox, esta última fue una de sus damas de honor, así lo asegura People. También estuvieron presentes otros invitados VIP como Robert Downey Jr, Howard Stern y Tobey Maguire. La celebración fue al aire libre y se organizó alrededor de mesas redondas, como es habitual los novios estaban acompañados en la mesa presidencial por la familia. Poco ha trascendido de uno de los secretos mejor guardados: el vestido de la novia.
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Tan solo un día después del enlace, la casa de la actriz amanecía con algunos rastros de la fiesta como un escenario instalado en el jardín y algunas mesas que áun quedaban por recoger, tal y como muestran las últimas imágenes aéreas. La pareja alquiló una casa situada en las inmediaciones de la residencia de la actriz y que se utilizó para guardar todo el material necesario para el enlace (mobiliario, elementos decorativos y demás utensilios), así lo asegura TMZ. Jennifer y Justin han formalizado su relación cuatro años después de haberse conocido, empezaron a salir tras coincidir en el rodaje de la película Wanderlust.
