Cristina Pedroche cierra una etapa de su vida y lo ha hecho por todo lo alto. La colaboradora de Zapeando a partir de ahora será la nueva presentadora de Pekín Express y sus compañeros de programa le han hecho una despedida llena de sorpresas, la más emocionante ha sido la visita de David Muñoz.
Después de dedicarle un vídeo en el que han participado muchas caras conocidas como Carlos Latre, Dani Mateo, Boris Izaguirre, Santiago Segura o el grupo Auryn, entre otros, pedían a la de Vallecas que abandonase el plató, lo que no se esperaba era que su novio fuera el encargado de sacarla de allí. Y lo hizo de una forma muy romántica y original, pedaleando un “tuk-tuk” en el que ella iba sentada.
Pedroche había tratado de reprimir el llanto durante toda la despedida, cuando Frank Blanco rompió a llorar, tuvo que tragar saliva tratando para contener sus emociones, sin embargo cuando el chef tres estrellas Michelin entró en el plató, ya no aguanto más y las lágrimas le resbalaron por el rostro.
David le dio un fuerte abrazo y bromeó con los colaboradores acerca de lo mucho que sabe ya Cristina de comida asiática, mientras ella no podía apartar de su chico unos ojos de total enamorada y es que el cocinero se ha convertido en su mejor apoyo. Él ya conoce a la familia de su chica y ella presume de novio delante de sus compañeros de trabajo, juntos forman una pareja perfecta.
Cristina y David, que comenzaron su relación el pasado mes de diciembre, tendrán que permanecer separados durante los meses en los que ella ejerza de directora de carrera del programa de Antena 3, que le llevará a recorrer 3.500 kilómetros por tres países de Asia. Algo que también será para un reto, aunque a eso está acostumbrada ya que es una gran deportista.
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“Os habéis convertido en personas muy importantes en mi vida, os llevo en corazón esté donde esté”, dijo una emocionada Cristina a sus compañeros, que ya ha confesado que ha metido en la maleta las zapatillas de deporte para continuar allí con sus entrenamientos de running –una afición de la que disfruta junto a su novio- y, por supuesto, la camiseta de su equipo del alma, el Rayo Vallecano.
