Una fecha que por desgracia nunca podrá olvidar. El 30 de septiembre es una de las fechas más difíciles para Isabel Preysler y es que en este día, terrible coincidencia, ha tenido que decir adiós a dos de las personas más importantes de su vida. Es un día 30 de septiembre, hoy martes en el año 2014, cuando Isabel asistirá al entierro de su marido Miguel Boyer (falleció el lunes 29), el hombre que ha estado junto a ella los últimos 29 años de su vida, el padre de su hija pequeña, su amigo, su compañero. La tristeza de Isabel es visible en su rostro y es que el exministro falleció de forma inesperada, dejando un vacío imposible de llenar.
Otro adiós que ha dejado marcada esta trágica fecha y es que fue otro 30 de septiembre, pero del año 2011, cuando Isabel tuvo que despedir a su hermana Beatriz, su hermana pequeña a la que estaba muy unida. Beatriz falleció víctima de un cáncer de pulmón en un hospital madrileño y también fue en el tanatorio de San Isidro donde se ofició una misa en su memoria. En aquella ocasión, Isabel también tenía en su familia a su mejor apoyo, entonces también Miguel fue su consuelo.
Acompañando a Isabel ayer en el tanatorio se pudo ver a la madre de Isabel, Beatriz, y los hijos de esta, Álvaro y Diego Castillejo, a los que Isabel quiere como si fueran sus hijos, que tendrán también esta fecha entre las que no pueden ni quieren recordar. Álvaro, que tiene una empresa de exportación, y Diego, que estudia Derecho, pasan largas temporadas en Manila con su padre, pero están profundamente unidos a Isabel y a sus primos. Hoy será un día muy duro, durísimo, y tendrán que sacar fuerza de la compañía y el cariño de sus amigos y allegados. La familia unida, de nuevo, en el dolor.
