Sergio Ramos y Pilar Rubio están viviendo el verano más maravilloso de sus vidas. Enamorados como el primer día y felices con su pequeño Sergio, la pareja está exprimiendo al máximo los días de sol y calor. Días antes de la boda de René Ramos, hermano del futbolista, y Vania Millán, Sergio y Pilar disfrutaron de unas merecidas vacaciones en la playa, como reflejaron las imágenes publicadas en sus respectivas cuentas de las redes sociales. Pero también han disfrutado de planes más sencillos. Antes de partir a Estados Unidos, donde hace unas semanas el futbolista comenzó la pretemporada junto a sus compañeros del Real Madrid, la pareja disfrutó de un agradable almuerzo en Madrid. Tan guapos y acaramelados como siempre, Pilar y Sergio dejaron por unas horas a su hijo en casa al cuidado de un familiar para tener un momento de intimidad como pareja.
Pilar estaba espectacular con un ajustado vestido negro que combinó con sandalias de cuña y bolso plateado. La presentadora ha recuperado su figura en tiempo récord tras dar a luz a su primer hijo el pasado 6 de mayo. Sergio, por su parte, lucía un pantalón de color beige, camiseta de manga corta de color naranja y gafas de sol de espejo. El jugador estuvo en todo momento muy pendiente de su chica a la que agarraba cariñosamente.
Ya de vuelta a Madrid, el futbolista volvió a los brazos de su chica y de su hijo Sergio, a quien todavía no le hemos visto la carita. La pareja no ha ocultado nunca su amor, pero sí guardan con recelo la intimidad de su primogénito, un niño muy deseado que puso el broche de oro a una bonita e intensa relación.
Y como tener pareja no significa estar las 24 horas del día a su lado, Pilar y Sergio siguen disfrutando de planes por separado. Hace unos días, fue la presentadora la que viajó con sus amigas a Viveiro, Lugo, para asistir al Resurrection Fest. Pero no se trató únicamente de un viaje de placer, Pilar fue la encargada de realizar las entrevistas oficiales del festival, según explicó la organización y, a juzgar por sus comentarios en Twitter, se lo pasó en grande entrevistando a las grandes estrellas del metal.
Aunque sea en Madrid y con numerosos compromisos profesionales a sus espaldas, a la pareja aún le quedan muchos días de verano para seguir disfrutando de su amor y de su hijo.
