El motor del avión no explotó en el accidente de Barajas

El accidente ocurrió por un cúmulo de causas

Por hola.com

AENA cuenta con una grabación de los últimos momentos del avión de Spanair accidentado el pasado miércoles en la Terminal 4 de Barajas. La grabación será determinante en la investigación para esclarecer las circunstancias en que se produjo el fatídico siniestro.

La cinta constata que el motor del avión accidentado de Spanair "no sufrió ninguna explosión", y que la deflagración se produjo en el suelo acuciada por las toneladas de la carga de combustible que portaba.

En la grabación se aprecia la salida del avión y cómo tras elevarse unos metros, se estrelló contra el suelo. No se divisa ninguna explosión del motor en el aire, pero sí cómo el fuselaje se extendió por la pista y, con el choque, comenzó a arder.

El coordinador de Aena en Levante, miembro de la ejecutiva estatal de CC.OO. en este ámbito y secretario de formación del sindicato, Nacho Knör, ha asegurado hoy que puede que el motor izquierdo "se gripase o que alguna pieza saliese despedida dando al empenaje de cola y eso derivara en un giro del avión a la derecha que el piloto no pudiera controlar".

Comienzan los análisis de las cajas negras
Expertos oficiales, policiales y técnicos estadounidenses han comenzado a estudiar el contenido de las dos cajas negras del avión, que contienen la información de los últimos minutos del vuelo y que aclararán qué falló antes del terrible suceso. Una de ellas, que almacena los datos, está dañada por el accidente pero es muy posible la recuperación de toda la información.

La otra caja graba los diálogos de los pilotos en la cabina y con la torre de control. Aunque el comandante no llamó a la torre desde que comenzó el despegue, la última conversación ente los dos pilotos está grabada.

El vuelo JK5022 cambia de nombre
El vuelo de la compañía Spanair de las 13.00 con la ruta de Madrid-Gran Canaria ha cambiado hoy el nombre y pasa a operar como JK5024. Abandona así la denominación JK5022 con la que llevaba funcionando hasta ahora.

Los pilotos están entrenados para actuar en caso de que falle un motor
"Ha habido más de un fallo"
. Es lo que afirmaba ayer el director general de Aviación Civil, del Ministerio de Fomento, Manuel Bautista. “Un fallo del motor no es causa de un accidente. Eso está de sobra contemplado en todas las normas. Junto con otras causas puede ser que tumbe el avión. Habrá que determinar el conjunto de causas que han concurrido", añadió.

La investigación sigue ahora tres vías: esclarecer por qué hubo un primer despegue abortado, por qué se dio luz verde al piloto para volver a despegar y qué causó el desplome de la aeronave. Muchas respuestas a estas preguntas se encuentran en las cajas negras del avión, y el vídeo de AENA del momento de la catástrofe.

Lo que se sabe
Lo que hasta ahora está claro es que el comandante del avión tenía previsto despegar a las 13.20 horas, y una vez en pista, abortó el despegue. Mats Jansson, presidente de la aerolínea escandinava SAS, dueña de Spanair, explicó que la avería que retrasó la salida consistió en un "calentamiento excesivo en una toma de aire que alimenta algunos sistemas del avión". Por su parte, el director de producción de Spanair, Javier Mendoza, añadió que el problema se solucionó "quitando el interruptor" de la alimentación. "Se aisló el problema, se corrigió y se despachó el vuelo". 40 minutos después, el comandante tenía vía libre para despegar.

No obstante, a los pocos metros de despegar, el avión se desestabilizó hacia la derecha y se estrelló contra el suelo.

Hay que determinar si hubo negligencia o no
Habrá que determinar si hay alguna negligencia a la hora de autorizar la salida del avión, o en su mantenimiento. De haberlas, existiría responsabilidad penal y habría que determinar los responsables. Si por el contrario no existe ninguna negligencia, la investigación se dirigirá a reclamar las indemnizaciones para los familiares fallecidos.